El centenar de auxiliares de Infantil que perdió su puesto de trabajo el pasado mes de septiembre por la no inclusión de la subrogación en la nueva contrata, exigió ayer a Eulen, la empresa gestora, que acabe con los nuevos despidos de las profesionales que fueron contratadas en su lugar.

Eulen ha prescindido ya de 25 de esos trabajadores nuevos que fueron contratados a inicios de curso por no cumplir con la titulación requerida, pero la medida no satisface a las auxiliares que perdieron su puesto en los centros educativos porque "en lugar de solucionar el problema lo agranda y es una chapuza", advirtieron desde CNT, el sindicato que asesora al colectivo y que acusó a Eulen de tener una actitud "caciquil".

Las auxiliares exigieron, eso sí, su puesto de trabajo "donde sea y con la empresa que sea" y advirtieron del perjuicio que están sufriendo los niños. "Ahora tienen que volver a adaptarse a una persona nueva, algo por lo que ya tuvieron que pasar a principios de curso", apuntó Ariadna, una de las despedidas. Por ello, el colectivo pidió a Eulen que sustituya los despidos por la "formación".

La empresa, que ha sido demandada por el 80% de las auxiliares despedidas, sí ha accedido, en cambio, a participar en una reunión junto a los representantes del colectivo y a la DGA que se celebrará el viernes en la Consejería de Educación. "Si hubiera acuerdo, por supuesto, la demanda podría retirarse y eso no perjudicaría a la empresa", aseguraron desde CNT, que apelaron a la "recolocación" o una "bolsa de trabajo" como posibilidades.