Si Zaragoza en Común (ZeC) no tiene guardado un as en la manga, negocia con Brial y logra alcanzar un nuevo acuerdo, la factoría Averly será parcialmente demolida. La Gerencia de Urbanismo aprobó ayer la licencia de derribo después de tres años de idas y venidas administrativas y judiciales. PSOE, PP y Ciudadanos (C's) votaron en contra de la solución presentada por ZeC para evitar la demolición de la fundición: aprobar un plan especial que modifique su catalogación para proteger el 100% de sus instalaciones, en lugar de solo el 32% y ofrecer una alternativa de suelos a los propietarios. Para paralizar la aprobación de la licencia de derribo de los edificios no catalogados era imprescindible que esta propuesta saliera adelante. Y no fue así.

Desde la oposición fueron claros: después de un año al frente de la concejalía de Urbanismo, su responsable, Pablo Muñoz, ha esperado hasta el último momento para tratar de cumplir con el eslogan de Salvemos Averly. Las más de tres horas de debate se centraron en la modificación del plan especial, la protección de todos los edificios y la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para ampliar el área de intervención situando el aprovechamiento lucrativo en otro emplazamiento.

MÁS INFORMES // Para el PSOE, el informe que presentó Muñoz como acreditación para cambiar la catalogación de Averly y el PGOU presenta "muchas dudas". El documento --de seis páginas y encargado el 10 de junio-- no desvela qué efectos jurídicos tendría la modificación del plan especial o en qué obligaciones indemnizatorias podría incurrir el consistorio teniendo en cuenta que Brial tiene unos derechos sobre Averly. Tampoco definía que catalogación tendría la factoría ni qué suelos maneja el Gobierno municipal como alternativa para que los propietarios de Averly edifiquen las 200 viviendas previstas y que sea equivalente. Y lo que es más importante, qué impacto económico tendría sobre el ayuntamiento. Una serie de incógnitas para las que pidió un mes de tiempo con el fin de que los técnicos tengan tiempo de ofrecer "garantías jurídicas". PP y C's apoyaron la petición del PSOE y votaron en contra de la propuesta de ZeC.

Muñoz insistió en que la información es completa y en que no quedaba tiempo, que ayer se cerraba "un ciclo" y que había que salvar sí o sí la factoría porque es patrimonio de esta ciudad y la única vía abierta era conseguir la protección total. "Ya no queda tiempo, hay que asumir la protección total de Averly", aseguró y después, según explicó, se decidiría qué suelos se le ofrecen a Brial. Solo CHA apoyó la reforma de ZeC, pero con líneas rojas. "Hay que salvar esta joya patrimonial", indicó la portavoz de CHA, Leticia Crespo, que condicionó su voto: "No sea que ahora ofrezca, por ejemplo, una zona verde".

El conservador Pedro Navarro puso sobre la mesa otra de las grandes incógnitas. El plazo para aprobar la licencia de derribo terminó el día 18. "Reconoce --en referencia a Muñoz-- que estamos fuera de la ley y lo hace sin despeinarse". El conservador acusó a Muñoz de querer hacer un "pelotazo" urbanístico por proponer recalificar suelos y que, así, Brial tenga donde edificar. Para Navarro, este intento de cambiar el PGOU no es otra cosa que un "expediente de Unidos Podemos" de cara a las elecciones --"y la galería"-- .

Desde C's, Alberto Casañal acusó a Muñoz de mirar por "sus intereses partidistas y no por los de los ciudadanos" en referencia a la alegación de Apudepa admitida por ZeC. Ha sido la única y en ella se pedía la catalogación total. "Nos tenemos que fiar de usted que solo ha hecho una valoración política y ahora tenemos que hacer un acto de fe". Ante este escenario, los grupos municipales instaron a Muñoz en más de una ocasión a que retirase el expediente del plan especial y, así, no tener que votar la licencia de derribo. Dos votaciones inseparables y condicionantes. Muñoz explicó que no era posible y que, "desgraciadamente", se iba a aprobar el derribo de la factoría.

La autorización de la licencia de derribo de Averly es un "acta reglada" por la que, si el solicitante cumple con todos los requisitos, no puede recibir un voto en contra porque se podría incurrir en prevaricación. PSOE, CHA y ZeC se abstuvieron y PP y C's votaron a favor.