El Mallorca superó tres meses de sequía y Joaquín Caparrós tomó oxígeno en el banquillo. El Betis desaprovechó una gran ocasión para estar en el cuarteto de cabeza en un partido en el que pudo golear en los primeros 45 minutos, con un mejor juego y claras ocasiones ante un rival cohibido. No fue así y al final lo pagó con una derrota que deja un sabor amargo a su afición que, no obstante, apoyó a su equipo en todo momento y despidió al colegiado con una sonora pita por su actuación, sobre todo en la jugada del segundo gol mallorquín, por un penalti que los béticos protestaron al estimar que la falta se produjo fuera del área.

Pudo el Betis dejar resuelto el partido en los primeros 45 minutos, en donde fue muy superior a un Real Mallorca con pocos argumentos y que pareció atemorizado. Así, el equipo que dirige Pepe Mel, tras inaugurar el marcador en el minuto 5, por medio de Beñat, en el lanzamiento de una falta, que rozó Mario, dispuso de ocasiones tan nítidas que lo más difícil era errarlas. Perdonó el Betis tanto que el Mallorca supo rentabilizar sus opciones y Víctor cabeceó para llevar la igualada (m.30) al electrónico En la segunda mitad llegó el tempranero gol del Mallorca, el 1-2, en una acción de Mario al borde del área, que desquició el betis, que ya no se levantó.