Estuvo a un paso de dejar el Atlético por segunda y definitiva vez la temporada pasada, pero siguió por amor a los colores, por si aún podía ser de utilidad a Simeone. La sanción de la FIFA impedía al club rojiblanco fichar hasta este invierno y Fernando Torres renovó hasta junio de este año, pese a que su relación con el técnico argentino ya acabó tocada el curso anterior.

Ayer aprovechó un acto publicitario para hacer oficial su despedida al término de esta temporada. Lo hizo con emoción, agradecimiento y con cierto resquemor, que no rencor, porque quisiera que las cosas fueran ligeramente distintas. «Las declaraciones de Simeone no tienen nada que ver con la decisión que he tomado. Si no se contaba conmigo para el próximo año me hubiera gustado un comentario previo, que me lo dijera, porque creo que es la manera de hacer las cosas», explicó el Niño.

«Tengo el compromiso del club de estar aquí el tiempo que ellos consideren y eso es un gesto muy noble que agradezco de corazón. Desde hace tres años y medio ha habido diferentes episodios en los que puedo tener opiniones diferentes, pero no creo que sea un día para reprochar ningunaactitud», añadió Fernando Torres.