El entrenador del Barcelona, Tito Vilanova, recibió ayer el alta hospitalaria, por lo que el técnico catalán abandonó el hospital Vall d'Hebron de Barcelona, en donde fue operado el pasado jueves de un tumor en la glándula parótida tras recaer en su enfermedad. Cumpliendo los plazos establecidos tras la intervención quirúrgica y después del éxito de la misma, Vilanova dejó el hospital momentáneamente hasta que, a principios de enero, inicie un tratamiento de seis semanas de quimioterapia y radioterapia.

Fue el pasado martes cuando a Vilanova se le detectó, en una visita rutinaria, una reproducción del tumor que le fue sustraído hace poco más de un año. En ese momento, los servicios médicos optaron por una nueva intervención.

Mientras, los jugadores del Barcelona saltaron ayer al césped del Nuevo Zorrilla con camisetas en las que se leía Anims (Ánimo') por delante y Seny, pit i collons (Cordura, pecho y cojones) por detrás, para dar sus muestras de apoyo al técnico. Asimismo, los futbolistas del Real Valladolid también se unieron a la iniciativa culé para mandar sus mejores deseos a Vilanova.