Los presidentes de Ibercaja, Amado Franco, y de La Caixa, Isidro Fainé mantienen aún intactas sus posibilidades de presidir la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA) cuando falta apenas una semana para alcanzar un consenso. Será el día 20 de abril cuando se conocerá al sucesor de Juan Ramón Quintás, pero ambos continúan buscando apoyos.

Según fuentes financieras, Fainé, que, en principio, sólo ocuparía este cargo durante unos dos años mientras se reordena el sector y se producen cambios normativos, está dispuesto a embarcarse en la presidencia de la patronal, si el sector de las cajas es prácticamente unánime en su elección. Las mismas fuentes agregaron que aún le queda por conseguir el apoyo de media docena de cajas, si bien el consenso que ha logrado hace que previsiblemente anuncie su candidatura en los próximos días, aunque no está obligado a hacerlo hasta la reunión del Consejo de Administración de la CECA el próximo 20 de abril. Tanto Fainé como Amado Franco entienden que en el actual escenario su elección debe ser ejemplo de unidad en el sector.

MANTENER EL ADN El presidente de Ibercaja no ha modificado los planteamientos que esgrimió tras presentar Juan Ramón Quintás su dimisión como presidente de la patronal, el 17 de marzo pasado, para impulsar el nombramiento de su sucesor.

Franco mantiene su candidatura para presidir la CECA para --como explicó entonces-- defender el "ADN del modelo" de las cajas, su personalidad jurídica propia, su compromiso con el desarrollo económico y social de los territorios donde actúan y las acciones de Obra Social que desarrolla.

Además de considerar que lo importante son los proyectos de futuro y no las personas que los defienden, otras fuentes financieras consultadas insisten en que Franco sigue postulándose con la intención de luchar desde la presidencia de la patronal por introducir las actualizaciones normativas oportunas para dotar a las cajas de capacidad para competir en el nuevo escenario financiero, pero sin perder rasgos básicos.

En una carta enviada a los presidente de las cajas, Quintás muestra su confianza en que estas entidades inicien una una "renovada estrategia" fundamentada en la unión, independencia, eficacia y vocación social del sector. Además, insiste en que la reforma jurídica de las cajas requiere "la atención urgente de un presidente que pueda afrontar plenamente una tramitación que será larga y compleja".