El empresario vasco Jabyer Fernández, azotado por las polémicas que rodean a sus empresas en Euskadi, está reorientando sus negocios hacia Aragón, donde ha encontrando mejor acogida. Tanto la DGA como Ibercaja y CAI apoyan sus proyectos. El último espaldarazo al presidente del grupo Afer, en decadencia por la crisis de buena parte de sus filiales --en procesos concursales--, ha sido la adjudicación de facto de dos parque eólicos en los concursos públicos de la DGA. Y su empresa Habidite asegura que sigue "vivo" el proyecto de instalar en Magallón una fábrica de pisos en serie, a pesar de los retrasos que acumula. La factoría, que ya trabaja en pruebas, funcionará este año con carácter experimental y unos 40 empleados.

Esta iniciativa industrial ha quedado muy desdibujada desde que en mayo del 2007 el presidente de Aragón, Marcelino Iglesias, y el constructor vizcaíno firmaron varios convenios para su implantación. Entonces preveían crear un mínimo de 1.100 personas. Pero mucho ha llovido en estos tres años. La crisis del ladrillo dañó duramente el negocio de este grupo empresarial y fracasó la implantación de una macrofactoría en Vizcaya similar a la de Magallón. Este proyecto encalló en un duro enfrentamiento de la compañía con la Diputación de Vizcaya, en manos del PNV y que en su día apadrinó y abanderó la iniciativa. El conflicto todavía colea en el plano judicial y político.

UN SOLO PEDIDO El futuro de la planta de Magallón tampoco está claro. El modelo de fabricación de pisos en serie patentado por Habidite no ha logrado una gran acogida en el mercado por el hundimiento del sector inmobiliario. El único pedido de la empresa ha surgido de la mediación de la propia DGA, que adjudicó una promoción de VPO en Valdespartera a una constructora de Jabyer Fernández (Nextis Edifica). Uno de los edificios que se levantarán, de cinco plantas y 20 viviendas, se hará con el sistema de pisos modulares de Habidite, que se juega con este pedido la credibilidad de su modelo.

Eso sí, a Jabyer Fernández no le han faltado apoyos en Aragón. Ibercaja le concedió hace un año un crédito de 24,5 millones de euros para la puesta en marcha de la planta y la promoción de viviendas de Zaragoza. Además, el Gobierno central aprobó en el 2009 una subvención de 5,1 millones de euros a fondo perdido para Habidite, que no aclara la situación actual de esta ayuda. La empresa se ha aliado con Caja Inmaculada y Enel en sendas sociedades eólicas que han logrado hacerse un hueco en los concursos del Ejecutivo aragonés

Fuentes de la DGA destacaron la vigencia de los convenios suscritos con Habidite y atribuyeron la redimensión del proyecto a la crisis del ladrillo. Por su parte, el alcalde de Magallón, Víctor Chueca, confió en que Habidite "siga dando pasos y genere riqueza y empleo en el municipio.