Ibercaja celebra hoy 140 años de trayectoria sin olvidar sus raíces aragonesas gracias a una gestión marcada por la independencia, la visión a largo plazo, el compromiso de la plantilla, la confianza de los clientes y mirando al porvenir con ilusión, con el reto a medio plazo de cotizar en bolsa.
Este es el balance que ha hecho el presidente de Ibercaja Banco, Amado Franco, en el acto institucional para celebrar en su sede central en Zaragoza el 140 aniversario de la entidad, hoy consolidada como el octavo grupo bancario del país, con tres millones de clientes entre particulares y empresas y un volumen de actividad que supera los 80.000 millones de euros en créditos y ahorros.
En su intervención, Franco ha hecho hincapié en que cumplir catorce décadas de actividad empresarial es siembre una satisfacción en cualquier sector, pero más aún en el caso de una caja de ahorros tras el "auténtico tsunami" vivido por el sector financiero español.
Ha resaltado que a lo largo de su historia, Ibercaja ha ido anticipándose a las complejas coyunturas, como la reciente financiera, y lo ha hecho manteniendo "intacta" la finalidad con la que en 1876 la Real Sociedad Económica Aragonesa de Amigos del País creó la entonces Caja de Zaragoza.
El denominador común permanente, ha agregado, ha sido contribuir al desarrollo económico, social y territorial de Aragón, y por ello ha impulsado y participado en los principales proyectos estratégicos de esta comunidad y su aportación ha sido "decisiva", como en la nieve, la logística o la automoción.
Pero además, ha proseguido Franco, Ibercaja ha sido especialmente sensible con el medio rural para ayudar a frenar la tendencia recesiva en actividad y población que ha sufrido gran parte de Aragón en las últimas décadas, y ha sido muy activa en el plano social y cultural a través de la Obra Social.
Franco ha destacado que aunque Ibercaja haya extendido su actividad por todo el país, su sede continúa en Aragón, algo que muy pocas comunidades autónomas pueden decir actualmente, y lo ha conseguido gracias a una gestión con independencia de sus órganos de gobierno y velando únicamente por los intereses de la entidad.
Ha agradecido en ese sentido la relación "modélica" que ha habido con los diferentes gobiernos de Aragón.
La profesionalidad de los equipos directivos para que la entidad haya logrado siempre niveles de competitividad elevados y el compromiso de una plantilla "ejemplar", que es "clave" en el éxito del modelo comercial, han permitido a Ibercaja llegar hasta hoy con la confianza del cliente, que es, ha subrayado Franco, el centro de todas las actuaciones y al que nunca hay que defraudar.
Por eso, ha apuntado, la entidad nunca ha comercializado préstamos con cláusulas suelo o participaciones preferentes ni tampoco ha sido "origen de escándalos de gobierno corporativo".
Con 1.270 oficinas en 50 provincias, líder en Aragón, La Rioja, Guadalajara, Burgos y Badajoz y una amplia presencia en Madrid y Levante que la entidad prevé aumentar, ha dicho Franco, Ibercaja mira al futuro con "ilusión y confianza", con las metas prioritarias de ser más digital, gracias al acuerdo firmado con Microsoft, y de crecer más en banca de empresas, personal y privada, sin olvidar el ahorro y las hipotecas.
Además, tiene el reto a medio plazo, con la Fundación Ibercaja como accionista de referencia, de cotizar en bolsa.
Esa es la vía más lógica teniendo en cuenta que la Fundación tiene la obligación de perder el control del banco antes de 2020, ha manifestado Franco previamente a los medios, al tiempo que ha descartado fusiones con otras entidades, ya que Ibercaja tiene un proyecto "independiente" y "los mimbres necesarios para salir adelante".
En el acto también ha intervenido el presidente de las Cortes de Aragón, Antonio Cosculluela, quien ha valorado que Ibercaja haya sabido afrontar con éxito las transformaciones y dar respuesta a las demandas sociales y a las exigencias del mercado manteniendo su "apego" por el territorio.
"La historia de Ibercaja no podría escribirse sin el concurso de Aragón" pero "tampoco la historia del Aragón contemporáneo sería la misma sin Ibercaja", ha señalado Cosculluela, quien ha insistido en que esta comunidad es uno de las pocos territorios que sigue contando con una entidad "independiente y solvente".
Con motivo de esta celebración, Ibercaja ha presentado la exposición "Pasión por la libertad", un ambicioso proyecto sobre el legado de la ilustración integrado por cuatro muestras que trasladarán al espectador al periodo entre 1700 y 1808 en el que se intenta recuperar y poner en valor los grandes avances en educación, libertades y cultura de aquella época protagonizadas por personajes ilustres aragoneses cuya actividad traspasaron las fronteras del país.
