Se cumple hoy un mes del descenso del Zaragoza y Agapito ya tiene perfilado el organigrama de su particular huida hacia delante. A la conocida llegada de Jesús, Suso, García Pitarch para llevar a cabo una dirección general de la entidad con amplias atribuciones se sumará una que se intuía con Isidro Villanova, que salvo giro improbable ostentará la parcela de representación de la entidad y será el nuevo presidente del Real Zaragoza. El cuarto de la era de Agapito, tras Eduardo Bandrés, el empresario soriano y Fernando Molinos. Además, a la secretaría técnica se sumará Moisés García León y otros exzaragocistas entrarán en el club.
Tanto a Isidro Villanova como a García Pitarch, ambos abogados de profesión y que se conocen bien dado que coincidieron como futbolistas en el Logroñés y mantienen una buena relación, Agapito les ha asegurado un distanciamiento de la actividad del club, dejarles gestionar la entidad, aunque él se mantenga como máximo accionista.
Este nuevo organigrama se debe plasmar en las próximas horas, días como mucho. Si no hay cambios, claro, porque con Agapito nunca son descartables. Si no llegan alteraciones, lo primero es que Pitarch estampe su firma como nuevo director general por tres años. El acuerdo está más que consolidado en varias reuniones en junio con Agapito, la más reciente el jueves pasado en Pozuelo. Y falta una última, pero las bases están sentadas ya. Después está previsto un cónclave esta semana, probablemente antes del jueves entre el propio Agapito Iglesias, García Pitarch, Isidro Villanova y Moisés para que la nueva andadura adquiera rango oficial. La presentación del nuevo organigrama sería, pues, a finales de esta semana.
TRES AÑOS
Las conversaciones con Villanova comenzaron hace tres semanas a través de contactos del entorno de Agapito con el abogado zaragozano, pero en los últimos días se han intensificado, delimitando todo. También han hablado Villanova y Pitarch en los últimos días y ya se han asentado ideas y proyectos de futuro. Una de las bases es una renovación en el organigrama de la entidad, donde llegarían nuevos nombres a diferentes áreas y en el que se quiere que el pasado zaragocista sea un denominador común en ellos.
Suso quiere que Villanova sea, también por tres años, su mano derecha, el hombre encargado de la responsabilidad institucional como presidente, aunque también con atribuciones ejecutivas y de gestión para este abogado aragonés que militó durante 14 temporadas en todas las categorías del Zaragoza. En todo caso, el mayor poder ejecutivo correspondería a Pitarch, que llega para gestionar la entidad zaragocista, no solo en su parcela deportiva, donde él tiene una amplia experiencia tras sus pasos por el Valencia y el Atlético. Además, la última temporada ha sido presidente del Hércules.
Villanova responde al perfil de conocedor del zaragocismo y zaragocista, además de tener el Máster en Dirección Deportiva de la Federación Española en el Fútbol. Sucedería en el cargo a Molinos, que ya anunció hace varias semanas su deseo de abandonar la presidencia tras un año en ese sillón y que se mantiene en el puesto para facilitar la transición. Dado el desarrollo de los acontecimientos, las horas de Molinos en el club aragonés ya están llegando a su fin.
INVERSORES
Falta por ver si Agapito cumple con Villanova y Pitarch la intención de apartarse, algo que no sucedió con los anteriores, con Molinos o con Salvador Arenere, éste consejero delegado efímero 10 días. En todo caso, el soriano anda a la búsqueda de inversores que entren con capital en la SAD y por ahí han ido los contactos en los últimos tiempos con el empresario Luis Oliver o con el expresidente del Málaga Fernando Sanz.
En este sentido, la llegada de García Pitarch también alimenta la posibilidad de tratar de buscar inversores, aunque Agapito siempre se mantendría como máximo accionista. Suso tiene muy buenos contactos en Suramérica, pero sobre todo en Inglaterra y más en concreto con la todopoderosa empresa CAA Sports, donde son socios Jorge Mendes y Peter Kenyon. CAA Sports ya estuvo muy próxima a Agapito Iglesias en el verano del 2011 y Pitarch entonces iba a llegar a La Romareda.
