La noche fue larga en Las Palmas, con miles de aficionados en las calles celebrando el ascenso y jaleando a sus jugadores. La plantilla que dirige Paco Herrera lo celebró en un escenario montado en la Plaza de la Victoria, donde los jugadores fueron tomando la palabra uno a uno. Cuando le llegó el turno al argentino Culio no dudó en decir: "Soy muy polémico. Se lo dedico a Popovic. Lo tenía muy armado, con Zaragoza festejándolo, pero los que lo festejamos hoy somos los canarios".

El gesto de sus compañeros fue de incredulidad, mientras que algunos de los aficionados presentes le recriminaron esas palabras después de una eliminatoria en la que no se han producido incidentes. Los seguidores de Las Palmas despidieron con aplausos tanto a los zaragocistas en las gradas como a los jugadores de la plantilla a su salida del estadio insular tras la derrota del domingo que les condenó a seguir en Segunda.