El presidente del Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA), Manuel Bellido, incidió en la obligatoriedad de que se ejecute en los términos acordados por la justicia la sentencia que ordena a Cataluña la devolución de los bienes del Monasterio de Sijena. El responsable judicial, que compareció ante los medios junto al presidente de la Audiencia de Huesca, Santiago Serena, destacó que un «principio básico» de un estado democrático de derecho es el cumplimiento de las resoluciones judiciales. «En el momento en que las sentencias no se cumplen --insistió el magistrado-- poco podemos hablar ya de un estado democrático y de derecho».

Manuel Bellido rechazó comentar la resolución de la Audiencia de Huesca pero señaló, sin embargo, que es «muy importante» para el desarrollo del proceso, ya que si se hubiesen estimado las pretensiones de la Generalitat, la ejecución de la sentencia hubiera quedado suspendida a pesar de ser provisional. El magistrado admitió que contra la sentencia de la Audiencia de Huesca caben aún la presentación de recursos «extraordinarios» por infracción de ley y de casación ante el Tribunal Supremo, aunque precisó que su función no es revisar los hechos y pruebas practicadas.

También lamentó la «resistencia» del Gobierno catalán a cumplir con la orden judicial de devolución de las 44 piezas pendientes de retornar al monasterio, pero advirtió de que el juez de primera instancia que hizo el requerimiento está capacitado para adoptar las medidas necesarias para su ejecución.

Respecto a la notoriedad pública del litigio y a su posible influencia en los jueces, Bellido destacó que los jueces «están acostumbrados a ese tipo de presión social».