Buesa quiere coger las riendas de la oposición

Domingo Buesa, el más que probable próximo presidente del PP de Zaragoza, tiene intención de cambiar la línea política y el discurso del grupo popular en el consistorio zaragozano, del que forma parte, una vez ocupe el cargo orgánico al que aspira. Disconforme con la labor de "funcionarios" que, a su juicio, se realiza ahora en el PP municipal, pretende "liderar" un nueva gestión "de oposición política a los grandes temas". Y aunque no habla de una redistribución de puestos --como la posibilidad de que el propio Buesa ocupara la portavocía--, sí invita a la "responsabilidad personal" para que cada uno "se sitúe donde debe".

El enfrentamiento entre el aparato regional del PP y el provincial de Zaragoza, dirigido por José Atarés (jefe de los populares en el ayuntamiento) parece que también tendrá consecuencias institucionales. Tras la alineación, el jueves, del número dos de Atarés, Luis María Beamonte, con la dirección oficial de Gustavo Alcalde --que apoya la candidatura de Buesa para la presidencia provincial--, al aún máximo responsable del partido en la provincia apenas le quedan bazas .

EFECTOS Y una de las repercusiones institucionales de esta crisis se verá en el ayuntamiento, donde por ahora Buesa apenas tiene apoyos, pues la mayoría de los ediles es afín a Atarés. Sin embargo, dado que la crisis se ha saldado a favor de la línea oficial, es más que claro que Buesa será presidente provincial el próximo 19 de diciembre y ayer no ocultó que quiere hacer cambios.

En declaraciones a este diario fue rotundo: "Cambiarán la línea política y el discurso. No vamos a seguir haciendo oposición puntual sobre un dato, sino una oposición política a los grandes temas, y sí, quiero liderarla", manifestó. Además, consideró que actualmente se lleva a cabo un trabajo de "funcionario" en el que se busca "el error nimio" y se va "a remolque", en lugar de dar respuesta a las grandes demandas sociales.

El edil no quiere aventurar si esta reorganización --que planteará como jefe del partido en la provincia-- incluirá que él mismo ocupe el puesto de portavoz y jefe de filas que ahora tiene Atarés. Pero a este respecto también es claro, aunque sea en forma de mensaje a navegantes : "Lo que pasará en el grupo ya se resolverá. Yo no moveré ficha. Pero cada uno tendrá que hacer un ejercicio de responsabilidad personal y hacia el partido y situarse donde debe".