Los tapones solidarios se extienden por las comarcas

Los padres de Aitana García, de Tarazona, rompieron el fuego hace unos años. Empezaron recogiendo tapones en una campaña solidaria masiva que permitió operar tres veces en Estados Unidos a la pequeña, que padecía un grave problema de salud que afectaba al corazón y los pulmones.

Pero ahora esta misma forma de ayudar al prójimo se ha extendido por muchas otras comarcas. Antonio Maestro, concejal de IU en Morata de Jalón, recorre las localidades situadas a un lado y a otro de la A-2, en la autovía de Madrid, pidiendo, además de tapones, gafas, latas y móviles que ya no usan sus propietarios.

"Tengo un almacén y un vehículo y recorro los pueblos recogiendo material en las tiendas y lo que me dan los particulares", explica Maestro, que asegura que no confía en el poder movilizador de los consejos comarcales y los ayuntamientos. Las gafas (ha llegado a reunir 600 pares) se destinan a la campaña Ilumina África. Pero los beneficios de los tapones van a ayudar a personas mucho más cercanas. Este es el caso, por ejemplo, de Aarón, un chico de Alfamén; de Andoni, que vive en Calatayud, y de Dani, que reside en Zaragoza.

"Mi hijo padece una enfermedad rara, una alteración mitocondrial sobre la que se sabe muy poco", señala Marta Muñoz, madre de Dani, de 10 años.

En su caso, al no ser posible una operación, el objetivo de la campaña de recogida de tapones es sufragar el coste de adaptación del coche y la vivienda familiar. "Ahora estamos buscando alguna empresa de transporte que quiera colaborar con nosotros", indica Marta, que ha creado una dirección de correo (juntospordaniel@hotmail.com) y una página de Facebook para poder seguir la evolución de la campaña. De momento, gracias sobre todo a la colaboración de Antonio Maestro, que peina todos los pueblos del Jalón, el Aranda y la comarca de Calatayud, ya se han reunido unos 180 kilos de tapones. "Se avanza lentamente, los tapones pesan muy poco y cuesta mucho reunir una cantidad que permita obtener buenos ingresos", comenta Maestro. "Pero siempre merece la pena ayudar a los demás".