--¿Se cree el proceso de renovación en el que está inmerso el PAR?

--Yo me creo los procesos de renovación. Me parece bien la decisión del presidente del partido. Pero cuando termine diré si es creíble o no. Todavía no sé lo que se ha propuesto y cómo se va a gestionar.

--¿Llega tarde la renovación?

--Sí, eso sí. Hace un año, ya dije que el 2015 suponía un reto difícil, pero también una gran oportunidad, y que había que revisar profundamente el ideario del partido y el modelo. Y desde la máxima unidad.

--¿Le parece que el proceso está tutelado?

--Sí. Ese aspecto a mí no me convence. Los procesos de renovación no hay que tutelarlos, sino que iniciarlos y dejar que se desarrollen. Es algo que deben hacer las bases. El futuro del partido está ahí, no en sus dirigentes. El PAR necesita una refundación. Hay que pelear para que este proyecto político sea lo que fue. Tuvimos hasta 19 diputados.

--¿Esa pérdida de votos la achaca solo a que han perdido su esencia?

--Yo creo que sí. Además hemos jugado un papel, el de dar estabilidad a los gobiernos, que también nos ha pasado factura. No se ha valorado este aspecto. Y se nos han imputado las partes negativas de la gestión. Pero lo que más nos está dañando, a nosotros y todos los partidos, es la desconexión con la sociedad, con la gente. A nosotros nos viene pasando, seguramente, desde hace más tiempo.

--¿La propuesta de un militante un voto la ha hablado con José Ángel Biel?

--No. Nosotros, mi equipo y yo, pensamos así. Los tiempos están cambiando. El presidente que salga elegido con el apoyo de los militantes yo creo que tiene más respaldo que el que lo haga solo con el de los compromisarios. Planteamos esto mucho antes de que los dijese nadie del PSOE, me gustaría dejarlo claro. Es un elemento central de nuestro proyecto. Y creemos que las comarcas deben estar representadas en los órganos, con gente elegida en ese territorio, no de fuera.

--En realidad da lo mismo quién esté en los órganos del PAR, teniendo en cuenta que ni siquiera se reúnen.

--Nunca da igual. Son dos temas diferentes. Los órganos de un partido son muy importantes. Dicho esto, no me parece bien que no se convoquen esos órganos. Se están controveniendo los estatutos del partido. Y no solo hablo del presidente. El comité nacional lo reúne el presidente de la mesa --Javier Callizo--. No es defendible.

--¿La sucesión está tutelada y encauzada hacia un determinado candidato?

--No lo sé. Tengo la sensación de que no hay unas reglas claras. El presidente puso en marcha un proceso de renovación y en medio hubo posicionamientos de candidaturas cuando ni siquiera se había convocado el congreso. Quien quiera teledirigir la sucesión se equivocará, y quien se deje telederigir también. Si hay un militante un voto no existe posibilidad de tutelaje.

--¿El congreso cuándo?

--Vamos tarde. Ya se debería de haber convocado mucho antes. Ir tarde es un error. A mitad de la legislatura hubiese sido un buen momento. Porque un congreso de renovación y refundación no se hace con seis meses de antelación.

--¿Y se lo ha dicho a Biel esto?

--Sí, sí. Es mi punto de vista.

--¿Le gustaría ser presidente del PAR?

--Hombre, un militante del PAR nunca puede responder negativamente a esa pregunta. Pero esa no es la cuestión, lo importante son las ideas y los equipos. Yo estoy abierto a cualquier posibilidad, ser presidente del PAR es un honor. Sobre todo para quien ha dedicado su vida a la política. Pero esa no es la cuestión. La clave es cómo, entre todos, desde la unión, hacemos esta refundación para presentarnos a las elecciones con un proyecto ilusionante. Nos hace falta más ilusión que resignación.

--De momento se han postulado dos personas, Arturo Aliaga y Javier Allué. ¿Ha hablado con ellos?, ¿le gustaría formar equipo con alguno de ellos, o opta por presentar su propia alternativa de liderazgo?

--Los adversarios que tiene el PAR están fuera. Respeto a Arturo Aliaga y a Javier Allué. Han trabajado mucho por este partido. Pero se han equivocado al hacer planteamientos fuera de plazo. Ha sido un error y han truncado el proceso de renovación de las ideas. Yo no voy a cometer ese error. Yo estoy dispuesto a defender nuestro proyecto, y si para eso tenemos que presentar una candidatura lo haremos. Pero será en el momento oportuno y buscando alianzas. Llegados a este punto, que se convoque el congreso cuanto antes.

--Cuanto antes es a finales de este año.

--Bueno, pues será volverse a equivocar. Si además de convocarlo tarde, se hace de forma precipitada serán ya dos errores gravísimos. Eso es potestad del presidente, y si lo hace siempre será con más unidad que si se tiene que hacer a través de otros mecanismos.

--Ha sido muy crítico con Aliaga.

--¿Yo? No. Me merece todo el respeto. Pero creo que cuando alguien tiene una responsabilidad que la ejerza. No queda bien que el secretario general sea el candidato.

--¿Fue un error entrar en el Gobierno de Aragón?

--Sí, yo creo que sí. Lo he mantenido desde el principio. Nosotros estábamos comprometidos, por el resultado electoral, a garantizar una estabilidad institucional, y eso era muy importante. Pero no implicaba necesariamente entrar en el Gobierno. Es una decisión que tomó la dirección del partido.

--Cuando dice la dirección, se refiere a José Ángel Biel.

--Sí, sí. A la presidencia del partido y a la secretaría general. Algo tendría que decir Arturo Aliaga en esa decisión, puesto que fue él quien entró en el Gobierno. Pero no fue una decisión ni un acuerdo adoptado en los órganos del partido. Pero hemos tratado de ser consecuentes. Hemos tenido solo un departamento, que es poco dentro de un Ejecutivo.

--No se olvide de que el PAR tiene unas cuantas direcciones generales.

--Pero políticamente eso tiene poca trascendencia porque la política la hacen los consejeros. Por cierto que Arturo --Aliaga-- lo está haciendo muy bien. Su papel es estupendo. Pero en todo caso entrar en el Gobierno debería de haberlo decidido el comité nacional. Se contravino un acuerdo del último congreso. Le hemos dado un tinte aragonesista al Ejecutivo, y eso se ha hecho profundamente desde el grupo parlamentario. Se han presentado 150 iniciativas. Más que nunca en su historia. Y todavía queda un año. No solo hemos estado, sino que hemos sido activos. Y en tres ámbitos: políticas sociales, empleo y la defensa de la autonomía. Se ha prestado un gran servicio a Aragón.

--No se ha mordido la lengua esta legislatura. Ha sido el verso suelto hasta el final.

--Bueno... Mi padre me enseñó que vales lo que vale tu palabra. Suelo decir que lo que pienso, y pienso lo que creo. Cuando ha habido cuestiones que no estaban en el acuerdo de gobernabilidad ni en el ideario aragonesista, he manifestado mi discrepancia. No es malo. No soy muy partidario del pensamiento único.

--Es que han gobernado con un partido centralista.

--Muy centralista. Sí. Por eso ha habido tanta discrepancia. Hemos aportado un tinte aragonesista al Gobierno, y al final el balance de esta legislatura es positivo. Hemos intentado que primasen las políticas sociales en un momento muy duro económicamente. No han sido cuatro años fáciles y el papel del PAR ha sido clave, se quiera reconocer o no.