Amenaza a su mujer con sacarle el feto a cuchilladas

Un vecino de La Puebla de Alfindén, C. J. L. G., ha aceptado una pena de 80 días de trabajos en beneficio de la comunidad por una brutal agresión a la que sometió a su expareja, en la que amenazó con sacarle a su hijo común del vientre con un cuchillo jamonero. El hombre deberá permanecer 32 meses alejado del domicilio y los lugares que frecuente su expareja, que ha renunciado a cualquier indemnización económica.

Según recoge la sentencia del Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1, en los hechos que el condenado dio por probados, abordó a su ya expareja por la noche, poco después de que esta le pidiese que se fuera de casa. La agarró de la pierna, cuando estaba tumbada en el sofá, y la tiró al suelo, donde se sentó sobre su tripa y le instó a que le dijese por qué le echaba.

"SI ME ECHAS, TE DEJO SIN HIJO" Se levantó y continuaron discutiendo, hasta que volvió a tirarla al suelo y a sentarse sobre ella, diciéndole "si me echas a mi, te dejo sin mi hijo", y haciendo ademán de golpearle en el vientre. Luego fue a la cocina, cogió un cuchillo jamonero y le reiteró que si se iba le sacaba al niño y se lo llevaba.

Luego, mientras la sujetaba por detrás, le mordió la cara, hasta que consiguió que soltase un cuchillo que la mujer había cogido para autolesionarse, de puro terror, según recoge la sentencia. La mujer, además del trauma, sufrió diversas lesiones en los brazos, los dedos y la espalda, aunque curaron en nueve días y, según el documento, no le han quedado secuelas.

VIOLACIÓN Por otro lado, la Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Zaragoza juzgará próximamente a un joven vecino de Zaragoza, para el que la Fiscalía pide siete años de prisión por violación. El joven, defendido por la letrada Carmen Sánchez, fue detenido el 19 de mayo del año pasado, en mitad de la presunta agresión sexual.

Según recoge el ministerio público, estuvo bebiendo en dos bares de ambiente latino con una amiga, hasta que esta llevaba tal borrachera que "no era consciente de su actos". La acompañó a casa y, antes de llegar a su piso, en el rellano del entresuelo, la desnudó de cintura para abajo y se sacó el pene, que consiguió introducir en la vagina de la víctima, totalmente inconsciente.

Una vecina, que observaba la escena por la mirilla, llamó a la Policía y los agentes encontraron al joven allí, tras lo que fue detenido e ingresó en prisión dos días después. La Fiscalía pide que pase siete años en prisión y que indemnice a la víctima con 6.150 euros.