El Ayuntamiento de Zaragoza quiere modificar los usos del suelo del polígono de Cogullada, ahora solo industrial, para poder ampliar su campo de negocio y evitar que acabe en el olvido. Por ahora no tiene claro qué quiere conseguir más allá de que haya más servicios, como gimnasios, restaurantes o alguna superficie comercial mediana, aunque estudiará la posibilidad de atraer nuevos operadores de la logística de proximidad y empresas centradas en la movilidad sostenible.

El concejal de Urbanismo, Víctor Serrano, explica que por ahora solo se plantean esta modificación para el polígono de Cogullada, al encontrarse prácticamente engullido por la ciudad y presentar más oportunidades de futuro.

El edil explica que no quieren que los cambios se limiten a crear en Cogullada un referente de logística de proximidad, conocida como última milla, como proponen los coordinadores del equipo de expertos de la Escuela de Ingeniería y Arquitectura (EINA), Belinda López y Enrique Cano. Estos están trabajando en la elaboración de una propuesta de regeneración urbana de esta zona industrial, a petición del ayuntamiento y que le servirá de guía. Según el concejal, esta innovación sería algo «complementario», ya que el Gobierno de PP y Cs busca que se puedan implantar otros servicios que, por otra parte, exigirían que la adecuación y modernización del polígono fuera menos exigente y, por lo tanto, la inversión del consistorio mucho menor.

SIN AUTOBÚS

Si algo tienen claro desde el ayuntamiento es que el transporte público no llegará ni a Cogullada ni a ningún otro polígono porque no es una competencia municipal dotar de este servicio a las empresas, que deben asumirlo. Esta es una de las principales reivindicaciones de los polígonos, ya que facilitaría el acceso y se reduciría el uso del vehículo privado, como sugieren en el estudio inicial de la EINA.

Desde el Clúster de Logística de Aragón, Francisco Bordeje considera que sería muy positivo crear un hub de paquetería. «La concentración de empresas siempre es positiva», asegura. Según explica, Cogullada presenta oportunidades que requerirían de la implicación y colaboración tanto de las empresas como de la administración. En el caso de la paquetería, y con el e-commerce en pleno crecimiento, sería positivo que las distintas compañías se concentrasen en un mismo punto, cercano al centro y la carretera, que permitiese liberar de vehículos de reparto a los barrios.

Lo ideal sería que cada empresa, como sucede en otras ciudades como París, repartiese por distritos concretos. Es decir, que el reparto de la mensajería se limitase por compañías y barrios, a los que optaría a través de un concurso público. Una propuesta que, sin embargo, admite que es complicada que se pueda llevar a cabo porque exigiría una gran inversión para adecuar el polígono y que las empresas modificaran su negocio y limitasen su reparto a determinadas zonas.

El mal estado del polígono complica su modernización

El Ayuntamiento de Zaragoza lleva años sin invertir en la conservación del polígono de Cogullada (ni en otros) y adecuarlo y modernizarlo requeriría de un desembolso económico por parte del consistorio muy elevado, aunque se implicasen las empresas. El concejal de Urbanismo admite que es necesario adecuarlo, aunque se haga de forma progresiva. Sin embargo, el gerente del Clúster de Logística de Aragón explica que para convertirlo en sostenible la inversión sería muy elevada ya que está completamente obsoleto para atraer a operadoras logísticas y convertirse en un polígono puntero de la capital aragonesa.