José Manuel S. B., el vecino de Pedrola que protagonizó una persecución a 200 kilómetros por hora por las calles del municipio para intentar huir de la Guardia Civil y la Policía Nacional ingresó en prisión tras así acordarlo la titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Zaragoza, en funciones de guardia. Su esposa, identificada como G. A. F., a la que abandonó junto a la hija de un año en un descampado mientras huía a pie, tal y como adelantó EL PERIÓDICO, quedó en libertad.

Ambos se negaron a declarar ante la magistrada por recomendación de sus abogados Carmen Sánchez Herrero y Roberto Soria, por estar la causa secreta y desconocer datos sobre la operación policial. En la vivienda de la pareja hallaron un kilo de cocaína cuya pureza tendrá que determinar el laboratorio.

Los otros dos arrestados en Tauste, identificados como J. M. M. L. y F. E. A. G., que serían los que distribuirían la droga, también fueron enviados a la cárcel de Zuera. La investigación continúa abierta por parte del Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) de la Guardia Civil y la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (Udyco) de la Policía Nacional este hombre sería reconocido entre el mundo de la droga por la calidad y pureza de la cocaína que disponía.

En el 2019, José Manuel S. B. ya fue juzgado por tráfico de drogas, si bien salió absuelto. La Fiscalía pidió una condena de cuatro años de prisión después de que en un control de carretera de la Guardia Civil, en la rotonda de Tauste-Gallur de la A-126, fuera interceptado con cinco bolsitas de cocaína con un peso de 4,12 gramos y una pureza que no suele ver ser normalmente de 80,72%. También se le ocupó otro bolsa con 320,34 gramos de cafeína y 1.960 euros en diferentes billetes.

El acusado explicó que era para autoconsumo y que el dinero procedía de premios de salones de juego. La argumentación se la creyó la Audiencia Provincial de Zaragoza y le exoneró.