Los colectivos sociales y vecinales de la ciudad de Huesca A Chordiga, Universidad Ciudadana, Federación de Barrios Osca XXI y Ecologistas en Acción ven insuficiente el acuerdo plenario del ayuntamiento de Huesca sobre la sustitución de las tuberías de fibrocemento de la red de abastecimiento de agua y solicitan una mayor aceleración del proceso y mayor implicación municipal, recordando que según la normativa sectorial este proceso debería haber finalizado antes del 1 de enero de 2012.

Las asociaciones han firmado dos escritos dirigidos al pleno municipal. En ellos indican que es un primer paso su acuerdo de elaborar y poner en marcha un “Plan de eliminación de las conducciones de fibrocemento de la red de agua potable de la ciudad de Huesca”, pero insuficiente. Para las asociaciones firmantes, la gravedad de un asunto de salud pública, el largo incumplimiento de los plazos indicados por la normativa y las recomendaciones de importantes organismos, como el Comité Económico y Social de la Unión Europea, que lo consideran un objetivo prioritario, contrasta con la tibieza detectada en el Ayuntamiento para poner solución.

Las tuberías de fibrocemento contienen amianto. Es causa de numerosas muertes y enfermedades como el cáncer de pulmón. Aunque sobre la ingesta de fibras de amianto a través del agua no hay pruebas concluyentes como para el caso del amianto inhalado, el principio de precaución aconseja una urgente sustitución de estas conducciones. Así se refleja en una resolución del Parlamento Europeo que indica que todos los tipos de amianto resultan peligrosos y sus efectos perjudiciales se han documentado.1

La presencia de amianto en la red de agua se deriva por la manipulación de las tuberías de fibrocemento en sus reparaciones y en su antigüedad. La mayor parte de las instaladas en la ciudad de Huesca han sobrepasado con creces su vida útil (40 años). Esta antigüedad da lugar a frecuentes averías y convierten el fibrocemento en material más desmenuzable y peligroso. En base a la actual normativa sectorial2 estos elementos ya debieran haberse retirado y depositado en vertederos controlados con ciertas condiciones de seguridad. Sobre la manipulación de las tuberías, se ha hecho llegar al ayuntamiento material gráfico donde desgraciadamente se observa que en la ciudad de Huesca este proceso se realiza a veces sin respeto a ninguna de las medidas del estricto protocolo que se debe cumplir. Ambas cuestiones son consideradas de gravedad por las cuatro organizaciones sociales.

Uno de los escritos presentados al ayuntamiento, se interesa por conocer si se están dando pasos en la búsqueda de financiación para el plan municipal anunciado para la eliminación del fibrocemento. El propio acuerdo plenario indicaba que podría solicitarse a los fondos europeos Next Generation. Para poder optar a esta convocatoria la redacción del plan ya debería estar bastante avanzado y presupuestado, lo que parece que no es el caso. También se demanda información sobre la licencias urbanísticas municipales de los últimos años donde se hayan realizado intervenciones en la parte de la red de abastecimiento formado por tuberías de fibrocemento.

Las entidades firmantes de los escritos, además de mayor celeridad en el proceso de eliminación de las tuberías de fibrocemento, también solicitan a la corporación municipal unos mínimos complementarios, como el control de la calidad del agua de los indicadores de la presencia de amianto y la instalación de sistemas de filtrado llegado el caso, una campaña de información, mayor control en las autorizaciones de reparación o parcheado parcial, apostando prioritariamente por la sustitución del ramal afectado y que se tenga también en cuenta la red de saneamiento. Igualmente se solicita que se constituya una Comisión Mixta/Grupo de Trabajo formada por los agentes municipales y entidades representativas de la sociedad oscense para conseguir alianzas y avances en la materia.