«Mi padre lleva ingresado desde junio en el hospital Miguel Servet de Zaragoza. Me parece lamentable que llevemos gastados más de 150 euros en el servicio de televisión, disfrutando de una tele de 14 pulgadas de hace 30 años donde se sintonizan 6 canales. Debería ser gratuito, los pacientes necesitan entretenimiento». Esta es la denuncia que Javier Franco ha realizado en las redes sociales y que se ha viralizado. 

El coste de este servicio es lo que especialmente molesta a este usuario de la sanidad pública aragonesa, quien no duda en asegurar que los precios «son abusivos». Así, el coste de un día son cuatro euros; tres días, 9 euros; y una semana, 17 euros. El coste total de un año rondaría los 900, un precio totalmente «desmesurado» para los pacientes. «El negocio es espectacular porque los gastos en infraestructuras no existen», destaca este zaragozano. Por si fuera poco, la calidad de la imagen y sonido es «nefasta».

«Para lo que llevo gastado me han llegado a decir que le compre una tablet. Pero si mi padre por un casual sale de la aplicación ya no sabe ponerlo bien. Es normal. Si tienes veinte años menos aún te lo puedes plantear», comentó Javier, que tampoco entiende cómo no puede existir el servicio de wifi gratuito en los hospitales para hacer más amenos los días de ingreso porque «un día ingresado parece que tiene 100 horas». Y aquí comienza su reivindicación, porque «no se trata de que el hospital sea un hotel», pero sí que el entretenimiento sea considerado como un elemento imprescindible en la recuperación del paciente: «Al igual que la dieta, debería formar parte del tratamiento, más cuando su salud mental es delicada». 

Otro elemento que no llega a comprender es la existencia de una sola televisión para los dos pacientes y propone soluciones alternativas como las que se han dado en la Comunidad de Madrid. «Allí puedes pagar por pantallas individuales con tus propios cascos para no molestar al compañero de habitación», señala. 

De este modo, Javier hace un llamamiento a las autoridades competentes para dar solución a este respecto. «Hagamos llegar nuestra voz al Gobierno de Aragón y a la consejería de Sanidad, para que mejoren la calidad de la estancia de los enfermos del sistema de salud pública de España», señala. La empresa Gotor Servicios Hospitalarios es la encargada de la gestión de el Miguel Servet, en el Clínico y en el Provincial de Zaragoza. 

La externalización ha sido la opción escogida durante años y años por las comunidades autónomas de España. Pero hay excepciones como la Comunidad Valenciana, donde el Gobierno autonómico anunció en 2019 que asumía la gestión de los equipos para evitar el copago a los usuarios y cifró en 1,2 millones de euros el coste que le suponía la medida. Más reciente, Madrid hacía lo propio para los pacientes covid para «evitar su aislamiento». 

Precisamente, el Justicia de Aragón se hizo eco de la situación este año cuando recibió una queja de un ciudadano y, tras admitirla a supervisión, envió un escrito al Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón para recabar información sobre el sistema de gestión. Así, en abril del 2021 respondió al Justicia que «el último concurso público de gestión de servicios, por el que se adjudicó el Servicio de Telefonía y Televisión para habitaciones de pacientes del hospital universitario Miguel Servet data del ejercicio 1998» y «a su vencimiento se acordaron diferentes prórroga». Por último, desde Sanidad transmitieron que «es intención de la Gerencia del Sector Sanitario ultimar dichos trabajos y licitar un nuevo concurso en los próximos meses, dotando al hospital Universitario Miguel Servet de un servicio moderno y acorde a los estándares de nuestro entorno para dar mejor y mayores índices de satisfacción a las necesidades de pacientes y usuarios del centro sanitario».

Mientras llega, el Justicia instó a Sanidad a que «agilice la tramitación del expediente de contratación para licitar, adjudicar y formalizar en documento administrativo, las condiciones del servicio de televisiones instaladas en las habitaciones de los pacientes». Todo sea para que la sanidad pública lo sea al 100%.