La Asociación Ictus de Aragón (Aida) advierte de que el 90% de los accidentes cerebrovasculares son evitables. Con motivo del Día Mundial del Ictus, que se celebrará el próximo 29 de octubre, el colectivo, junto a los hospitales Clínico y Miguel Servet de Zaragoza, van a participar en la campaña Cuida lo que más te importa, en la que también participan otras comunidades con el objetivo de compartir conocimiento y reducir el impacto de esta enfermedad. En Aragón se produjeron durante 2020 un total de 2.070 ictus.

Esta patología continúa siendo la primera causa de muerte en mujeres y la tercera entre hombres en Europa. Cada año afecta a 17 millones de personas y causa más de seis millones de fallecimientos. "Es urgente adoptar más medidas para sensibilizar a la población y evitar el aumento del 34% de los casos que se prevé haya en 2030", han indicado este lunes desde la asociación aragonesa.

La edad es el principal factor de riesgo para sufrir un ictus, seguido de la hipertensión arterial. "Una de cada cuatro personas va a sufrir un ictus en lo que le queda de vida. Hay que saber reconocer sus síntomas tempranos y dónde buscar atención", ha señalado Javier Marta, coordinador de la unidad ictus del Servet.

De igual forma, ha puntualizado que es fundamental la prevención. "El 90% de los casos serían evitables llevando un estilo de vida saludable. Esto es, no fumar, hacer ejercicio, llevar una dieta equilibrada, dormir convenientemente y mantener la tensión a raya. El estilo de vida, sobre todo en las edades medias, entre los 40 y los 60 años, marca mucho cómo se envejece", ha apuntado el neurólogo.

En algunos territorios se ha registrado un aumento de la demanda por sospecha de ictus en paciente joven. En un estudio realizado en Aragón. se comprobó que la incidencia de ictus en el adulto joven (menor de 50 años) fue de 12,2 por 100.000 habitantes/año. 

Ante un paciente con un ictus isquémico agudo, es importante actuar con rapidez, puesto que cada segundo cuenta. Pese a todo, "hay algunos otros problemas de salud que pueden presentarse de forma muy parecida a un ictus agudo, por lo que estamos investigando y avanzando en herramientas de diagnóstico que nos permitan ser más precisos y podamos ajustar mejor los recursos, tanto para aplicar las medidas farmacológicas, como en el uso de camas en las Unidades de Ictus", ha dicho Carlos Tejero, jefe de la unidad ictus del Clínico.

Los esfuerzos de la Asociación Ictus de Aragón se centran en la prevención de los accidentes cerebrovasculares y la recuperación de la autonomía de quienes los sufren. Una las principales reivindicaciones de la asociación es que se mejoren los medios para que los pacientes tengan acceso a un adecuado tratamiento rehabilitador para la recuperación funcional y cognitiva.