La guerra de Ucrania, la explosión de contagios de coronavirus provocada por ómicron, el paro del sector del transporte de mercancías por carretera y la inflación han pasado factura a la economía aragonesa, cuyo crecimiento se han moderado en el primer trimestre del año. El producto interior bruto (PIB) de la comunidad registró un incremento de ocho décimas (0,8%) en dicho periodo, un tasa un punto y ocho décimas inferior a la del trimestre precedente (2,6%). La cifra, no obstante, casi triplica la media del conjunto de España (0,3%) y es superior en cuatro décimas a media de la Unión Europea (0,4%).
En términos interanuales, sin embargo, el crecimiento estimado de Aragón de enero a marzo de 2022 es del 5,4% respecto al mismo trimestre de 2021. En este caso, el incremento es mayor al registrado en el cuarto trimestre de 2021 (4,2%), pero se sitúa un punto por debajo de la previsión para el conjunto de España (6,4%) y dos décimas de la Unión Europea (5,2%).
El último pronóstico sobre la evolución del PIB lanzado por el Gobierno de Aragón se hizo en octubre de 2021 y apuntaba a un crecimiento del 7,1% en 2022, en línea con las previsiones de todos los organismos. En los últimos meses, todos los organismo y servicios de estudios han rebajado sus expectativas --Funcas, al 3,3%, Ibercaja al 4,4%, la Fundación Basilio Paraíso al 5,7% y la Airef al 6,2%-- y como también hará necesariamente la DGA cuando revise sus cálculos, algo que hará una vez se conozca el comportamiento de los dos primeros trimestres del año.
Desde el punto de vista de la demanda, la evolución anual seguida por la economía aragonesa se explica tanto por el favorable comportamiento de la compra interna como externa, que contribuye al incremento del PIB autonómico durante el primer trimestre. El primer caso, el gasto en consumo final de hogares aragoneses crece un 1,8% respecto al mismo trimestre de 2021. Esta tasa es inferior en un punto y tres décimas a la registrada por el conjunto nacional (3,1%).
El gasto público solo sube una décima
Por su parte, el gasto en consumo final de las Administraciones Públicas aragonesas aumenta un 0,1% anual, dato siete décimas por debajo de la media nacional (0,8%). Respecto a la formación bruta de capital, la inversión en bienes de equipo registra un crecimiento del 11,5% anual, seis décimas inferior al dato promedio del país (12,1%).
Finalmente, la inversión en construcción presenta una caída interanual del -0,9%, a comparar con el mejor dato relativo experimentado por la media de España durante el período (1,3%).Con los datos disponibles en materia de sector exterior, las exportaciones aragonesas de bienes y servicios aumentaron un 10,3% respecto al primer trimestre de 2022, frente a la superior tasa de variación positiva anual que registra el conjunto nacional (20,8%).
Por otro lado, las importaciones regionales de bienes y servicios se reducen un 0,8% respecto al mismo trimestre del año anterior, dato inferior al registro del 12,1% interanual obtenido por la media del país.
Desde la óptica de la oferta, los sectores productivos de la economía aragonesa registraron una evolución dispar en el primer trimestre. Los servicios lideran el crecimiento de la oferta en la comunidad autónoma, con una mejora del valor añadido bruto del 7,7%, dato seis décimas inferior a la media del país (8,3%).
La principal rama de comercio, transporte y hostelería se incrementa en Aragón el 18,1% anual durante los tres primeros meses de 2022, frente al aumento del 19,6% experimentado por el conjunto nacional.
En cuanto a la industria manufacturera, el valor añadido bruto crece el 1,3% respecto al mismo trimestre de 2021, siete décimas por debajo del registro promedio nacional (2,0%).
Por su parte, el sector primario, que engloba las actividades de agricultura, ganadería, silvicultura y pesca, presenta un retroceso del 0,7% en la evolución de su valor añadido bruto durante el primer trimestre del ejercicio, tasa superior a la registrada por el conjunto de España (-1,3%).Finalmente, el valor añadido bruto de la construcción decrece un -0,8% anual, registro peor que el anotado por el promedio de España (1,1%).
