La Federación de Enseñanza de Comisiones Obreras (CCOO) denuncia que el Gobierno de Aragón va a ejecutar un recorte de 100 maestros para el próximo curso 2022/2023, aunque cifra "el recorte real" en aproximadamente 600. Según informa el sindicato en una nota de prensa, el Gobierno de Aragón no está aplicando las medidas recomendadas por ley que permitiría contratar a más de 500 nuevos maestros y maestras en Aragón y dar una atención más personalizada a familias y alumnado. Desde la DGA niegan este extremo.

Según los cálculos del sindicato, de ese centenar de docentes, más de 60 pertenecen a la provincia de Zaragoza. Además, denuncian que se ejecuta sin haberse negociado el cupo docente como tradicionalmente se hacía al final de cada curso académico y que "ha supuesto una dotación de docentes menos adaptada a las necesidades reales de los centros educativos".

CCOO Enseñanza Aragón denuncia que este cupo además se ha calculado asignando 25 horas lectivas a cada docente y no refleja la reducción horaria del profesorado de más de 55 años, a pesar de que la ley aprobada por el Gobierno central recomienda con carácter ordinario un máximo de 23 horas. Esto hace que, según el sindicato, Aragón debiera de contratar a medio millar de docentes en Infantil y Primaria.

"Es indignante que nos veamos en esa situación, cuando otras regiones, como por ejemplo Canarias ha incorporado a 2.600 nuevos profesores y profesoras al sistema público en los últimos dos cursos", añaden desde el sindicato. CCOO insiste en que Aragón es una de las dos únicas gobernadas por el PSOE, junto con Castilla La Mancha, que no revierte los recortes en educación implantados por el PP.

Desde la consejería de Educación muestran su desconcierto con los cálculos del sindicato. Fuentes de la DGA remarcan que "dado que es la primera vez que se publica el cupo", desconocen de dónde sale la cifra del centenar de docentes que cita CCOO. Insisten además que los llamamientos de inicio de curso responden "a necesidades contrastadas". 

Sobre los 500 cupos adicionales, en el caso de que se redujera el horario de maestros de 25 a 23, dicen que "la aplicación de esta medida no seria en ningún caso reversión de recortes puesto que nunca los maestros han trabajado 23 horas lectivas a la semana; sería, en cualquier caso, una mejora de condiciones laborales", apuntan.