El tramo de la carretera nacional N-232 que sirve para acceder a Utebo desde la A-68 se reconvertirá en una autovía urbana para "humanizar" esta carretera facilitando el tránsito de peatones y aumentando la seguridad al integrar el trazado en el ecosistema urbano del municipio. El Ministerio de Transportes invertirá 6,2 millones de euros en esta operación que, de cumplirse los plazos que el propio ente se da, estará finiquitada a finales de 2024.

El objetivo que se persigue con esta remodelación es minimizar el riesgo de accidentes, pues en un futuro la vía podría ser pacificada y reducir a 30 kilómetros por hora la velocidad de paso. "Vamos a transformar de golpe la carretera y eliminaremos esas barreras, barandillas o cierres para que pase a ser una avenida, es decir, una calle con más con pasos de peatones, rotondas, carriles bici o arbolado. Es una transformación total de una vía que nació con una función que ha cumplido sobradamente y que ahora queremos que dé un servicio diferente", ha explicado el secretario general de Infraestructuras, Xavier Flores, que ha mantenido este lunes una reunión con los alcaldes de la zona para presentar el proyecto.

Flores se ha atrevido también a poner fechas al plan de reconversión. "Confiamos en que el proyecto, que está en proceso de información pública, se licite durante el primer semestre del año que viene y que la obra sea una realidad a finales de 2024", ha afirmado el secretario general de Infraestructuras. Por este tramo de la conocida como Autovía de Logroño discurren de forma diaria unos 34.000 vehículos

Además, el ministerio presentará esta tarde la mejora del enlace entre la A-68 y la Z-40, en la que invertirá 23 millones de euros para desatascar uno de los mayores cuellos de botella de los accesos a la capital aragonesa, ubicado en el enlace que llega desde la autovía de El Burgo de Ebro.