Los apicultores dicen 'basta' en una protesta frente a La Aljafería

Los apicultores aragoneses han protagonizado este viernes una protesta a las puertas de La Aljafería para exigir ayudas directas a esta forma de ganadería y mejorar el control de calidad de las importaciones a bajo coste. Para ello, vestidos con sus trajes de faena, han escenificado la muerte de esta forma de ganadería frente a la sede de las Cortes de Aragón.

Los apicultores han sido convocados por la Unión de Agricultores y Ganaderos de Aragón (UAGA) para reclamar subvenciones directas por colmena al sector apícola profesional para poder superar el "grave momento de crisis" que atraviesan, haciendo mención que estas mismas ayudas se han otorgado a otros sectores para paliar los efectos de la guerra de Ucrania. "Ayudarían a compensar parcialmente el sobrecoste de mantenimiento de las colonias de abejas y la pérdida de producción, en un contexto de grave crisis de mercado", señalan desde la organización en un comunicado. Desde COAG se demanda un importe de ayuda de 10 euros por colmena, con un límite de ayuda por explotación de 1.000 colmenas.

Además, piden que la bonificación de 20 céntimos por litro de combustible llegue también el sector apícola profesional entre los sectores a los que se prórroga en 2023. En las explotaciones apícolas profesionales, tanto estantes como trashumantes, el combustible es uno de los costes de producción que condicionan más la cuenta de resultados, según denuncian desde COAG.

En un comunicado, UAGA muestra su rechazo a las nuevas exigencias burocráticas "que quieren imponerse a las explotaciones apícolas españolas". "El MAPA debe atender con flexibilidad a las particularidades del sector en la futura aplicación de los reales decretos de trazabilidad, identificación y registrode determinadas especies animales así como de veterinario de explotación y plan sanitario integral. Estas exigencias que, sin duda, pretenden únicamente facilitar el trabajo de la Administración, no aportarán ninguna mejora a las explotaciones apícolas y las personas consumidoras, mientras que perjudicarán enormemente a las explotaciones apícolas familiares y profesionales", señalan. Además, piden promover la autorización de nuevos medicamentos (eficaces) contra varroosis para que apicultores y apicultoras puedan seguir haciendo frente a esta enfermedad parasitaria endémica y sortear la cada vez mayor resistencia de este parásito a los acaricidas existentes.

Respecto a la comercializción de la miel, los productores exigen un mayor control de la calidad de las mieles importadas, así como de las posibles adulteraciones y de la miel envasada en el mercado interior español. "La situación actual de paralización y bloqueo de la miel producida en origen en nuestro país, que soportan injustamente los apicultores y apicultoras con el objetivo, por parte de la industria y la distribución, de obligarnos a vender a bajos precios, es una práctica desleal inaceptable que no puede convertirse de facto en una amenaza estructural en cada campaña apícola", explican desde UAGA.