Zuera da su último adiós a Luis Zubieta

Los vecinos de Zuera han despedido este lunes por última vez a Luis Zubieta, su alcalde durante los últimos ocho años, que falleció el pasado sábado en un accidente de tráfico. Junto a los centenares de zufarienses que se acercaron a darle el último adiós hasta el consistorio de la localidad acudieron decenas de representantes políticos y de la sociedad aragonesa. 

Desde las 10.00 horas, el Ayuntamiento de Zuera volvía a abrir sus puertas para permitir a los vecinos despedir a su alcalde. Pocos minutos después, Marta Fernández, presidenta de las Cortes de Aragón, era la primera representante política en llegar a Zuera, antes de abrir un goteo incesante de caras conocidas. 

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Los miembros del Gobierno de Aragón, ya en funciones, hicieron acto de presencia poco después. Arturo Aliaga, Marta GastónMayte Pérez, Mariví Broto, Joaquín Olona, Felipe Faci y Sira Repollés llegaron a Zuera poco antes de Javier Lambán, presidente en funciones, y José Luis Soro, que lo hicieron a la vez. 

En el PSOE destacaron las presencias del secretario de Organización, Darío Villagrasa, o de la portavoz del grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Zaragoza, Lola Ranera. También el expresidente de las Cortes, Javier Sada, o el presidente de la DPZ, Juan Antonio Sánchez Quero. El expresidente autonómico Marcelino Iglesias también acudió a la despedida de Zubieta. 

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Octavio López, mano derecha de Jorge Azcón dentro del Partido Popular, y Ramón Celma, presidente del PP en la provincia, fueron los representantes de los conservadores. La alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, acudió directamente a la iglesia de la localidad. 

El delegado de Gobierno, Fernando Beltrán, acudió al acto, así como Isaac Claver y Miguel Gracia, presidente y expresidente, respectivamente, de la DPH. El líder de IU, Álvaro Sanz, el Secretario General de UGT en la comunidad, José Juan Arceiz, o el primer espada de UAGA, José María Alcubierre, fueron algunos de los rostros públicos que acompañaron a los vecinos de Zuera. Varios representantes de los municipios franceses hermanados con la localidad también acudieron a despedir a Zubieta.

Unos zufarienses que se reunieron frente al ayuntamiento para atender al responso que ofreció el arzobispo de Zaragoza, Carlos Escribano, junto al párroco de la localidad, Víctor Pinilla. Escoltado por miembros de la Policía Local de Zuera y rodeado de su familia y autoridades, Zubieta fue recordado por «todas sus obras buenas y la entrega a su trabajo». 

El cuerpo de Zubieta fue llevado hasta la Iglesia Parroquial de San Pedro, transportado por miembros de su familia y dos concejales del Ayuntamiento de Zuera. La plaza junto a la iglesia se desbordó y los cientos de vecinos que acudieron al velatorio siguieron el funeral por las pantallas y altavoces instaladas en el exterior del templo.

María Zubieta, hija del fallecido, agradeció la presencia de tantos vecinos y recordó a su padre como «una persona con una bondad tan evidente que no precisaba de artificios». Para ella, la figura de su padre le hacía creer que «la bondad puede ser un arma transformadora», e insistió en que recordaba «lo feliz que había sido estos años» como alcalde y gran municipalista. 

El presidente en funciones del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, también dirigió unas palabras a todos los asistentes a la iglesia. Admitió que se sentía «apenado y desolado como todos los presentes» y transmitió los dos mensajes que sus majestades Felipe y Letizia le hicieron llegar. Dos mensajes de consuelo dirigido a la familia y a los miembros del Ayuntamiento de Zuera. Lambán cerró su intervención deseando que «Luis esté ya para siempre en el lugar en el que siempre quiso estar».