La educación concentra las primeras inversiones del nuevo curso político

Inicio de curso en el edificio Pignatelli a tan solo una semana de que las clases vuelvan a llenarse de niños. El nuevo Ejecutivo autonómico centró las decisiones de su segundo Consejo de Gobierno en el inmediato arranque del curso, con espacio para los anuncios de directores generales y un primer acercamiento a ese sistema de dependencia al que quiere dedicar mucho esfuerzo. "Estas actuaciones se acometen para mejorar la vida de las familias aragonesas y para garantizar su bienestar", ha señalado la portavoz del Ejecutivo autonómico, Mar Vaquero.

El mayor impulso económico se lo lleva el convenio firmado por la DGA y las entidades locales para financiar al personal del nuevo curso académico. En total, 7,3 millones de euros que llegarán a 164 escuelas infantiles –dirigidas a niños de 0 a 3 años– repartidas en 158 municipios por toda la geografía aragonesa.

Otro millón de euros llegará para contratar a 40 profesionales en 19 centros aragoneses cuyo trabajo se centrará en la relación con el alumnado con necesidades específicas. 13 enfermeros, 10 técnicos y 17 fisioterapeutas componen la plantilla. "La voluntad del Gobierno es que su incorporación se de al comienzo del curso", ha detallado Mar Vaquero, portavoz del Ejecutivo, que advirte de la posibilidad de que los profesionales cambien de centros, "porque las necesidades de los colegios van variando". Su contrato será temporal, precisamente por esos cambios que cada escuela tiene en su alumnado al finalizar el curso.

La inversión en personal no fue la única línea que Vaquero marcó ayer como primeras actuaciones del Ejecutivo en materia educativa. El convenio mantenido con la DPT destinará hasta 750.000 euros para financiar obras de mejora en 98 centros educativos de la provincia bajoaragonesa. 250.000 euros los aportará el Gobierno autonómico, que con estas pequeñas partidas reparará aulas, mejorará el sistema de iluminación, ampliará espacios o acondicionará zonas de paso.

Los acuerdos de la DGA también traspasan los límites autonómicos y llegan a firmarse con el Ministerio de Educación, para incorporarse al proyecto Aula del Futuro, en el que también participa la multinacional asiática Samsung.

El objetivo de este programa es incorporar las nuevas tecnologías al día a día en las aulas, adaptándose así a la realidad en la que vive la sociedad aragonesa. "Con este acuerdo se quiere mejorar el uso metodológico de la tecnología, para que los profesores sepan usar mejor estos elementos y los alumnos puedan aprender mejor con ellos", resume Vaquero.

El único anuncio que presentó la creación de nuevos centros fue el decreto para dos escuelas infantiles en la Base San Jorge de Zaragoza y en el Acuartelamiento Sancho Ramírez de Huesca. Dos nuevos centros educativos que podrán albergar hasta a 123 alumnos, ya que el de la capital aragonesa tendrá espacio para 82 niños y el de Huesca para 41 infantes. Los dos centros serán creados en dependencias militares y tienen por finalidad satisfacer la demanda de apoyo a las familias del personal destinado en las Unidades de la Plaza para la conciliación familiar y mejora de sus condiciones laborales.

Para la vicepresidenta segunda del Gobierno de Aragón, Mar Vaquero, estas acciones se engloban dentro de la política de un Ejecutivo que quiere "reforzar los servicios educativos y el futuro de la comunidad". La portavoz del Gobierno ha dado también a conocer la postura del actual Ejecutivo respecto al anuncio de que la nueva EVAU no entrará en vigor en este curso. "Seguimos apoyando la idea de que exista una sola Selectividad", insiste Vaquero, que ha transmitido su querencia por que "todos los alumnos de todo el país tengan las mismas pruebas".