El Burgo de Ebro se reivindica como polo de atracción industrial

Dentro del mapa económico de Aragón, el municipio de El Burgo de Ebro se reivindica como un polo de atracción de inversiones logísticas e industriales de la comunidad. Esta localidad vinculada a la industria de fabricación desde hace décadas prosigue su desarrollo con hitos importantes en su haber. Dos claros ejemplos son la implantación del centro de datos del gigante de la distribución Amazon Web Services –que opera desde noviembre de 2022–, y la futura construcción de una planta de hidrógeno verde, ambos en el polígono Espartal II.

Todavía se desconoce la fecha para el inicio de las obras de esta instalación energética que promueven CEAR y Enagás, y que supondrá una inversión de 140 millones de euros (13 de ellos procedentes del Perte de energías renovables) y la creación de 40 empleos. Según el alcalde de El Burgo de Ebro, Vicente Royo, el proyecto ha sido declarado de interés autonómico y se encuentra en fase de planificación y tramitación de los permisos necesarios para el inicio de los trabajos. "Hay un plazo de 36 meses para que la planta empiece a producir hidrógeno de acuerdo con el Perte ya que se trata de una obra de ingeniería compleja", asegura.

Con su construcción, la localidad zaragozana se situará a la vanguardia en España y en el resto de Europa del desarrollo del hidrógeno como energía renovable y alternativa, lo que comportará también importantes ventajas para tu tejido productivo en el avance hacia la descarbonización de la industria y el transporte.

Ya se ha iniciado la modificación del PGOU para crear 20 nuevas hectáreas de terreno industrial

Por otra parte, Royo señala que la llegada de Amazon Web Services ha supuesto un acicate para otras empresas de sectores asociados que han mostrado interés por instalarse en la localidad. De hecho, el ayuntamiento trabaja en la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para crear en el municipio otras 70 hectáreas de terreno industrial y facilitar así la llegada de nuevas compañías.

Mejora de las comunicaciones por la A-68

Asimismo, la proyección de futuro del municipio depende también del desarrollo de unas buenas vías e infraestructuras de comunicación. El Burgo ya es un importante nudo de comunicaciones gracias a la ARA-A1, que conecta la localidad con cualquier punto de España. Sin embargo, las mejoras que se están produciendo en la A-68 supondrán un nuevo impulso importante para el eje económico de la carretera de Castellón en el que se ubica la localidad.

Esta misma semana han comenzado las obras en la rotonda de la A-68 con el cuarto cinturón de Zaragoza con «menos atascos y muchas menos afecciones de lo que pensábamos», asegura Royo, que añade que hasta ahora esta infraestructura, que se ejecuta con 20 años de retraso, "era un muro que impedía el desarrollo de este eje industrial". "Una vez esté terminado el paso inferior, nos dará una entrada directa a Zaragoza, como todos los demás ejes de la ciudad, que nos evitará muchas molestias, tanto a los vecinos como a las industrias y los trabajadores", recalca el primer edil.

En paralelo, continúan los trabajos para el desdoblamiento de la A-68 (antigua N-232) entre El Burgo y Fuentes de Ebro, que entrará en servicio en 2024. Una reivindicación histórica de los municipios, debido a su peligrosidad, que conllevará “mayor seguridad aparte de un importante impulso industrial a la zona".

Desde el ayuntamiento reclaman también la conexión directa de los polígonos La Noria y El Vadillo con la autovía A-68 para evitar que el tráfico pesado circule por la travesía, y mejorar de esta forma la fluidez en los accesos y salidas de la zona industrial, donde trabajan diariamente cerca de 3.000 personas.

Superficie industrial disponible

El Burgo de Ebro dispone actualmente de cerca de 340 hectáreas de suelo industrial distribuidas en cinco polígonos industriales donde se asientan empresas de diversos tamaños y sectores de actividad. Royo Cabezón es el polígono más antiguo y cuenta con más de 20 hectáreas de superficie. Posteriormente se construyeron La Noria y El Vadillo, que suman otras 50 héctareas, donde se ubican las medianas empresas de la localidad, con una horquilla de 10 a 250 trabajadores. 

Entre ellas figuran importantes firmas como United Petfood Spain (fabricante de alimentos para mascotas), Grávalos (piezas para automoción y línea blanca de electrodomésticos), Maquinaria Meyco (componentes para cementeras y molinos eólicos), Tupersa (fabricante de tubo corrugado), Sillería Aragonesa (sillas y mobiliario) o Jóvenes Carroceros (reparación de camiones, remolques y semirremolques). 

El polígono Espartal I es de más reciente creación y está ocupado en exclusiva por las multinacionales papeleras Saica e ICT Ibérica (antigua Tronchetti). En el Espartal II es donde se encuentran Amazon Web Services, la futura planta de hidrógeno, Transverich (transporte y lavadero de camiones) y Maquinza (alquiler de maquinaria). Ambos suman 65 hectáreas de superficie.