La cooperativa Virgen de la Oliva de Ejea absorbe a la de Castiliscar

Ambas entidades aprueban en sendas asambleas la integración que ha venido motivado por un problema de deuda que arrastraba la entidad absorbida como consecuencia de la quiebra de Arento

La salida de socios aceleró la quiebra del grupo Arento

Vista general de las instalaciones de la cooperativa Virgen de la Oliva de Ejea de los Caballeros.

Vista general de las instalaciones de la cooperativa Virgen de la Oliva de Ejea de los Caballeros. / COOP. VIRGEN DE LA OLIVA

La cooperativa Virgen de la Oliva de Ejea de los Caballeros se hace aún más grande. La entidad ha aprobado recientemente la absorción de la cooperativa Cristo del Castillo, situada en la vecina localidad de Castilliscar, que ha optado por tomar este camino debido al problema de deuda que arrastraba como consecuencia de la quiebra del gigante agroalimentario aragonés Arento. Con esta integración, la sociedad agraria de la capital de las Cinco Villas, una de las mayores del sector a nivel autonómico y nacional, incrementa todavía más la ya amplia base social que tiene, formada por 2.500 socios, y se refuerza a nivel productivo.

La operación ha sido aprobada en sendas asambleas generales de ambas cooperativas, celebradas los días 22 y 28 de septiembre, si bien la votación entre los socios de la entidad ejeana fue por un resultado estrecho. Desde Virgen de la Oliva rehusaron hacer cualquier comentario o valoración sobre la integración a preguntas de este diario, aunque fuentes del sector consideraron que este movimiento entra dentro de la normalidad y permite consolidar la actividad y zona de influencia de la entidad absorbente.

La absorción no parte de la nada. Hacía ya tres años que ambas sociedades venían manteniendo una estrecha vinculación a través de un acuerdo de colaboración que ha precipitado en este proyecto de fusión. La cooperativa de Castilliscar es de perfil claramente cerealista, con unos 150 socios y una facturación anual que se sitúa entre los 2 y 3 millones de euros. La producción ronda entre los 10 y los 12 millones de kilos de cereal en un año normal.

El problema de Cristo del Castillo era la deuda de un millón de euros que le dejó Arento, el grupo cooperativo del que era socio que se declaró en concurso de acreedores hace ya tres años. El agujero se generó por impagos en las ventas de trigo y cebada. Tras valorar distintas opciones, entre las que se barajaron la entrada en el grupo navarro AN o en el leridano Actel, el consejo rector de la misma optó por la integración en el gran cooperativa ejeana.

El anuncio de la absorción ha sido publicado este lunes en el Boletín Oficial de Aragón (BOA), donde se informa a los posibles acreedores que tienen la posibilidad de ejercer su derecho de oposición en el plazo de dos meses desde esta publicación.

Un motor económico de las Cinco Villas

La cooperativa Virgen de la Oliva nace en 1943 en Ejea de los Caballeros con 80 socios. Hoy representa a más de 2.500 agricultores y es una de las más importantes en toda España en producción de cereales, forrajes y con una tendencia creciente en los últimos años en lo que respecta a multiplicación y comercialización de semillas.

La facturación de la sociedad ejeana supera los 55 millones de euros al año con la comercialización de más de 200.000 toneladas de materias primas. La de Castilliscar es la quinta cooperativa del campo que absorbe tras las de El Bayo, Santa Anastasia, Bardenas y Castejón de Valdejasa, que ha ido intregrando en las últimas décadas. Se trata por tanto de uno de los motores económicos de la comarca de las Cinco Villas.