CONCESIÓN

Índigo gestionará de nuevo el parking de Salamero

La empresa pagará de forma anticipada todo el canon que pedía el ayuntamiento

Acceso al parking de plaza Salamero, que lleva cerrado más de tres años.

Acceso al parking de plaza Salamero, que lleva cerrado más de tres años. / Andreea Vornicu

Iván Trigo

Iván Trigo

La empresa Índigo volverá a gestionar el parking de la plaza Salamero de Zaragoza. La compañía ha sido la que más puntos ha conseguido en el concurso público que impulsó el ayuntamiento de la capital aragonesa para adjudicar esta concesión, por la que Índigo pagará al consistorio 13.700.400 euros de forma anticipada, siete millones de euros más de lo que establecían los pliegos.

Esta era la segunda vez que salía a concurso la explotación del subterráneo. En la primera, y tras recibir varias propuestas, el Gobierno municipal decidió anular el proceso para incluir novedades, elevar el canon y añadir nuevas condiciones al contrato de explotación. Entre las exigencias destaca la obligatoriedad de destinar 6,4 millones en mejoras de la infraestructura.

Así, el contratista, Índigo en este caso, tendrá que asumir el coste del desmantelamiento y sustitución de la losa de cubierta y pilares de la primera planta sótano, bajo la avenida de César Augusto. También tendrá que crear un nuevo acceso de la salida a esta avenida y renovar los pavimentos y servicios de saneamiento, abastecimiento, alumbrado y semaforización entre las calles Ramón y Cajal y San Idelfonso.

El párking de la plaza Salamero lleva cerrado desde principios de 2020, cuando la losa superior de la estructura cedió parcialmente. Comenzó entonces un largo proceso de renovación y reparación que finalizó este mismo año con la inauguración del nuevo espacio público. En ese impás de tiempo caducó la concesión del aparcamiento, que ya estaba explotando Índigo, y entonces se abrió un litigio entre el ayuntamiento y la empresa por ver quién de las dos partes tenía la responsabilidad en el hundimiento de la estructura del subterráneo.

Índigo defendía, en base a los informes encargados por la propia empresa, que el hundimiento se debió a la sobrecarga de la plaza mientras que el ayuntamiento argumentaba que la causa fue un error constructivo.

La compañía llegó a reclamarle al ayuntamiento más de dos millones de euros en concepto de indemnización por no haber podido explotar el parking tras el hundimiento. Pero la Justicia, en primera instancia, dio la razón al consistorio.

El aparcamiento abrirá cuando se formalice el proceso de adjudicación y, entre las novedades, contará con doce cargadores de coches eléctricos.