SERVICIOS AÉREOS EN LA CAPITAL ARAGONESA

El verano acerca al aeropuerto al récord de pasajeros en Zaragoza

Suma 535.371 usuarios, un 14% más que en 2022, que terminó con 627.837 y su mejor dato en 11 años

Viajeros bajando de un avión de la compañía Vueling en el aeropuerto de Zaragoza durante el verano. | ÁNGEL DE CASTRO

Viajeros bajando de un avión de la compañía Vueling en el aeropuerto de Zaragoza durante el verano. | ÁNGEL DE CASTRO / D. L. G.

David López

David López

El aeropuerto de Zaragoza sigue volando alto en este 2023 camino de intentar batir su récord histórico de pasajeros que se marcó hace doce años, en un 2011 que en Aragón se recuerda con añoranza por las cotas tan altas de ocupación y de oferta para un área de influencia de dos millones de personas. El despegue, surgido tras la pandemia en la pista de Garrapinillos, dejó un 2022 con las mejores cifras de usuarios de los últimos once años y en el actual batirlo está garantizado: lleva acumulados 65.000 más y su global, 535.371 entre enero y septiembre, supera la estadística que ofrecía la terminal aragonesa a finales de octubre, es decir, más personas con un mes menos.

No va a ser fácil acabar el 2023 batiendo el récord histórico pero Zaragoza se acerca a sus mejores registros de pasajeros tras una larga travesía por el desierto de más de una década. De hecho, sus datos actuales solo están a la altura de los mejores años de la pista de Garrapinillos, aunque siguen por debajo, tanto en el mes a mes como en el acumulado, de las cifras de 2011, e incluso de 2010. Aún así, terminar el pasado mes de septiembre con 62.002 pasajeros, un 1,2% más que ese mismo mes en 2022 y un 35,1% más que en 2019, antes de la pandemia del coronavirus, es un logro incontestable. Un mérito trabajado a base de atraer nuevas conexiones desde Zaragoza con el resto de Europa.

un verano de buenos datos

La estadística actual arroja un verano como el de los mejores tiempos de la pista aragonesa. En solo cuatro meses, se han movido por la terminal de Zaragoza un total de 264.862 pasajeros. Y es un dato ligeramente inferior a los 265.173 usuarios registrados hace un año, cuando las cifras de la pista de Garrapinillos ya apuntaban a una importante remontada y acabaron el ejercicio con más de 620.000 viajeros en todo el 2022.

Ahora la previsión es mucho mayor y, a la vista de los datos de Aena, se ha fraguado en los meses que no son los de verano, entre enero y mayo, con una oferta adicional, la de los vuelos chárter que este año tiene mucha más presencia en los puentes festivos y casi en cada mes de este 2023. De hecho, el resultado final es el de incrementar en un 14% los viajeros contabilizados en Zaragoza en los nueve primeros meses del año, ya que los 469.725 registrados entre enero y septiembre de 2022 son ahora los 535.371 que se suman en este 2023.

Con respecto al horizonte del año histórico del récord de pasajeros, el del 2011, este pasado verano sí queda más lejos de aquellas cifras de hace doce años. Aunque en el global no deja a Zaragoza a una distancia inalcanzable en los próximos tres meses. Y es que si en el cómputo global este 2023 está a solo 55.000 viajeros de los 590.125 que la pista de Garrapinillos llevaba contabilizados entonces entre enero y septiembre, durante la época estival se contabilizaban 291.497 usuarios transportados en los cuatro meses del verano. Casi 27.000 menos y la mitad de la distancia que separan a la terminal aragonesa de su propio record. Tampoco la oferta de entonces era la misma que ahora.

En el mes a mes del verano, si este año se registraron 58.497 viajeros en junio, 71.367 en julio, 72.996 en agosto y 62.002 en septiembre, en esa misma etapa del año 2011 eran registros muy superiores en todos ellos, con 63.059 en junio, 79.034 en julio, 84.167 en agosto (record mensual que sigue vigente en la pista de Zaragoza) y 65.237 en septiembre.

el covid queda atrás

Sin embargo hay dos datos que permiten mantener la esperanza de acercarse un poco más al record histórico del aeropuerto zaragozano en lo que resta del año. Por un lado, que la oferta actual, tanto de vuelos regulares como de viajes programados con chárters, es más amplia que en años anteriores. También comparación con el año pasado, cuando terminó el ejercicio 2022 con 627.837 pasajeros contabilizados en la pista aragonesa. Ya entonces duplicaba –un 125% de incremento– los datos del año anterior, el 2021, y eran un 34,2% más que en 2019, antes del estallido de la pandemia del coronavirus.

El otro indicador apunta a que, precisamente, las diferencias con años anteriores se marcan sobre todo en la comparativa con los meses que no están en los meses de verano. Y a su favor también está el mérito de estar registrando estas cifras con la crisis actual de las economías domésticas provocada por la inflación, el aumento de los costes que se repercuten en el billete y el contexto político internacional que puede desincentivar los viajes a algunos destinos.

En su contra está, por otra parte, la entrada en un periodo como el otoño en el que los expertos apuntan a una contención en el gasto mayor que durante el verano y una oferta de vuelos regulares que, en el caso de Zaragoza, se verá reducida aunque menos que otros años. En este caso, el próximo 27 de octubre despegará de la pista de Garrapinillos el último vuelo del año a Bolonia, que ha estado activo todo el verano y ahora desaparece de la parrilla de Ryanair. Con Bruselas también pasará de volar tres días a la semana a hacerlos solo dos este mes, igual que a Milán. En cambio, Londres aumenta una frecuencia semanal y serán cinco y París y Marrakech se mantienen con dos salidas a la semana.