Engie invertirá 100 millones para hibridar la central de gas de Castelnou con energía solar

El gigante industrial y energético promueve una planta fotovoltaica de 155 MW en el entorno del ciclo combinado

La compañía controlada por el Estado galo se alza como referente del mix de energía en Aragón, con casi 1.350 megavatios repartidos en gas, eólica y minihidráulica

Castelnou 3

Castelnou 3

El gigante francés Engie quiere seguir escalando peldaños en el sector energético de Aragón, donde es ya un operador de primer nivel. Juega un destacado papel en la producción de electricidad con eólica, minihidráulica y gas. En esta última tecnología está presente a través del ciclo combinado que tiene en Castelnou, donde precisamente ha lanzado recientemente un gran proyecto para mejorar el rendimiento energético. La compañía quiere hibridar la central térmica de la localidad turolense, de 800 megavatios (MW) de potencia instalada, con una planta fotovoltaica de 155 MW que se levantará en su entorno. La inversión rondará los 100 millones de euros.

La iniciativa se encuentra ya en el proceso de tramitación administrativa en el Gobierno de España, que el pasado mes de septiembre abrió el plazo de información pública del expediente. La planta solar, denominada Saurus, ocupará una superficie aproximada de 360 hectáreas en los términos municipales de Castelnou y Samper de Calanda, donde se colocarán 284.580 módulos fotovoltaicos. Desde la multinacional se han marcado el objetivo de poner en marcha la nueva instalación solar en 2025 o 2026.

La hibridación es un proceso de generación de electricidad que utiliza dos o más fuentes de energía aprovechando una misma capacidad de evacuación. Esa complementariedad hace que sea más eficiente este sistema, que se vio favorecido por una nueva regulación aprobada en 2020. Lo novedoso del proyecto de Engie es que plantea vincular la central de gas con energía fotovoltaica, ya que lo habitual es que sea entre solar y eólica.

La central térmica de gas de Castelnou fue la primera que se puso en marcha en Aragón, donde hay otras dos plantas de este tipo en Escatrón. Con una vida útil de 30 años, entró en funcionamiento en 2006 de la mano del grupo belga Electrabel, que poco después fue adquirido por Engie (antes GDF Suez). Cuenta con dos turbinas de gas y una de vapor.

Desde Engie consideran que los ciclos combinados son «clave» para el sistema energético porque dan garantía de suministro, pero advierten de la crisis que vive este tipo de centrales en la actualidad ya que cada vez se usan menos por el apogeo de las renovables. «El modelo de mercado actual no les permite recuperar costes, por lo que su viabilidad a medio plazo está comprometida», señalan.

Rechazo a los nuevos impuestos de la DGA

Al margen de los problemas de negocio de esta tecnología, que se define como «generación flexible y baja en carbono», la compañía ratifica su apuesta por invertir y continuar creciendo en Aragón. «Es una región en la que nos sentimos muy cómodos y queremos seguir invirtiendo», afirman a este diario fuentes de Engie, que destacan sus ventajas en cuanto a recursos, talento y «condiciones estructurales». Aunque confían en que ese «atractivo se mantenga», muestran una «cierta preocupación» por los impuestos a las renovables del Ejecutivo autonómico, que verán la luz en los próximos meses.

Los nuevos tributos verdes obligarán a la compañía a rascarse el bolsillo en los casi 500 megavatios eólicos que tiene en la comunidad. Estos activos se reparten en dos proyectos promovidos por Forestalia. Por un lado Goya (192 MW), en el que es desde hace unos meses el accionista mayoritario al elevar su peso del 15% al 66%. Y por otro, Phoenix (342), que posee el 24%, pero estudia elevar la participación.

De la hidroeléctrica de Sástago a la red de calor y frio de la Expo

Cuenta también con 40 MW minihidráulicos entre Sástago y Gelsa a través de la empresa centenaria Electrometalúrgica del Ebro, que adquirió en 2011 al hacerse con la matriz International Power.

Engie, surgido en 2007 de la fusión de Suez y Gaz de France (GDF) y controlado por el propio Estado galo, tiene en sus manos 1.340 MW en la comunidad, más del 11% de toda la capacidad instalada en este territorio (11.646 MW). Las cifras ponen de relieve que Aragón es uno de los principales focos de su negocio en España, al aglutinar más de un tercio de la potencia que opera en este mercado.

A nivel nacional es actualmente el sexto agente generador de luz, con 3.600 megas en servicio, con una cuota del 3,6% . De ellos, 2.000 corresponden a centrales de gas y 1.600 a renovables (1.443 de eólica, 136 de fotovoltaica y 65 de minihidráulica).

La actividad de la multinacional en Aragón se complementa con la empresa Districlima, concesionaria de la estación de frío y calor del complejo de la Expo.