INVERSIÓN

Aragón Más Vivienda: 300 millones en seis años para acabar con “una emergencia social"

Azcón anuncia el primer gran proyecto de la legislatura, dirigido a los "47.000 jóvenes” que no pueden emanciparse

Octavio López desgrana un plan con seis líneas y seis instrumentos, pero sin un número concreto de casas

El presidente de Aragón, Jorge Azcón, durante la presentación del plan de vivienda.

El presidente de Aragón, Jorge Azcón, durante la presentación del plan de vivienda. / MARÍA MUÑOZ

Sergio H. Valgañón

Sergio H. Valgañón

El Gobierno de Aragón ha anunciado el programa Aragón Más Vivienda, el primer gran proyecto de la legislatura que destinará 300 millones de euros en los próximos seis años -hasta el 2030- con el objetivo de acabar con una «emergencia social» y con el que estructurar el futuro de la comunidad. Una medida que combinará la nueva construcción con la rehabilitación de antiguos espacios y que llegará hasta la ciudadanía en una mezcla de oferta de compra y alquiler. Según las estimaciones del Ejecutivo, la construcción de todas estas viviendas -que ningún representante público ha querido poner cuantía- podría llegar a generar 6.000 empleos en el sector de la construcción.

El presidente Azcón ha asegurado que este proyecto es «uno de los primeros encargos que hice al llegar al Gobierno» y lo ha considerado un trabajo «fundamental», todo «un deber, como es construir vivienda pública en régimen de compra y alquiler». Así, el plan contará con 300 millones de inversión (120 millones de euros del Gobierno de Aragón, 73 desde el Gobierno central y 107 millones desde los fondos europeos) repartidos en seis estrategias acciones propias, seis de tipo estatal, seis líneas europeas y ejecutadas con seis instrumentos. «El seis va a ser el número mágico», ha bromeado Azcón, que ha definido su primera gran iniciativa como «una medida de choque de forma inmediata que se debe hacer realidad».

El líder del Ejecutivo autonómico no ha querido cifrar el número de viviendas que se construirán en la comunidad en los próximos años, amparado en la estrategia que ya siguió como alcalde de Zaragoza: «Damos el dato global de inversión, porque hay que entender que no todas las construcciones o rehabilitaciones tienen el mismo coste». El presidente aragonésha puesto número a la cantidad de viviendas necesarias, unas 16.000, y al número de jóvenes, el colectivo más afectado por este problema, que quiere emanciparse y no puede, en torno a los 47.000. Ha adelantado, por otro lado, que el primer paquete de viviendas «llegará antes del verano, antes de que cumplaños un año en el Gobierno».

Además del anuncio económico y de la ejecución del plan, Azcón ha afirmado que las intervenciones en los municipios «se harán de la mano de los alcaldes y nunca se llevarán a cabo sin llamarles», asegurando que «ni un solo proyecto» que afecte a las localidades se iniciará sin contar con el apoyo del ayuntamiento en cuestión. El presidente ha reivindicado otro de sus grandes proyectos, el Plan Pirineos, que hará que las cuatro comarcas pirenaicas tengan una notable relevancia en este nuevo plan de vivienda: «Son municipios con alta presión turística y en los que se genera empleo, por lo que se puede llegar a desarrollar un círculo virtuoso». En esa clasificación de zonas tensionadas, que el Ejecutivo autonómico sigue perfilando, se encuentran espacios turísticos como los Pirineos, zonas de Teruel como la Sierra de Albarracín o las tres capitales de provincia.

En materia

El encargado de presentar Aragón Más Vivienda ha sido el consejero de Fomento, Vivienda, Movilidad y Logística, Octavio López, que ha definido como «ambicioso y realista» un plan que «no tiene ideología» y que aspira a «poder ayudar a los jóvenes porque ni el mercado ni las administraciones lo han hecho en los últimos tiempos».

No se ha acordado en exceso de las cifras de viviendas construidas por el anterior Ejecutivo autonómico Octavio López, que sí advirtió que la vivienda es «una emergencia social» contra la que toca actuar. El responsable del departamento ha utilizado el número seis para sustentar su exposición: años, programas estatales, las líneas de fondos europeos, las actuaciones propias y los instrumentos, todos son seis.

Uno de esos elementos será la ley de vivienda de Aragón, que López se ha comprometido a que «entrará en vigor en el año 2025 y definirá la posición de la comunidad en asuntos tan importantes como las zonas tensionadas o la okupación». Las otras acciones, que computan 90 millones de euros, incluyen una directriz especial de ordenación territorial, el fomento de la vivienda protegida (9 millones), la ayuda a la adquisición de vivienda (22,5 millones), un plan para los 39 municipios de más de 3.000 habitantes (6 millones) y un plan para la regeneración de los cascos urbanos de las localidades más pequeñas (52,5 millones).

Entre los instrumentos de ejecución del plan se encuentran las concesiones demaniales y patrimoniales, la promoción desde Suelo y Vivienda de Aragón, el apoyo a los ayuntamientos para el impulso de sus propias obras, los convenios de colaboración con los propios consistorios y una ayuda transversal en la demanda por criterios de renta.

El vicepresidente autonómico y consejero de Desarrollo Territorial, Despoblación y Justicia, Alejandro Nolasco, ha recordado que «los departamentos de Vivienda y Despoblación van a ir de la mano durante toda la legislatura». El propio Nolasco ha definido como «ambicioso y atractivo» un plan que «responde a las necesidades que Aragón precisa actualmente». El líder de Vox en la comunidad ha reivindicado el papel de la vivienda en el mantenimiento de la población en los municipios más pequeños, argumentando que «la gente no se va a quedar a vivir en el territorio ni los pueblos se van a llenar de vida si no hay viviendas para habitar». Por último, el vicepresidente primero ha asegurado que el pimulso a la vivienda va a ser «la piedra angular en la lucha contra la despoblación».