Los vecinos de Sástago discrepan ante el proyecto de la nueva variante

Un proyecto de 2020 que ahora ha sido catalogado como «urgente» y con orden de ejecución inminente está perturbando a los vecinos de Sástago. La construcción de una carretera que cruzaría por 200 huertos parece una realidad y sus habitantes, con la inmensa mayoría contrarios al plan, están organizándose para comenzar acciones reivindicativas y así intentar echar abajo los propósitos de la Administración.

El Plan Extraordinario de Carreteras del Gobierno de Aragón incluyó una variante que tiene como objetivo permitir la circulación de vehículos agrícolas y de transporte pesado. A pesar de que el plan ha cumplido con todos los trámites exigidos, los vecinos de Sástago aseguran que no se ha evaluado lo suficiente su impacto y su viabilidad, así como tampoco han sido estudiadas las afecciones sobre el patrimonio. «No sé cómo pueden seguir adelante con semejante barbaridad. Es una carretera que no va a tener otra función que llegar a un puente», denuncia Ricardo Garín, uno de los portavoces de los vecinos, que asegura que «existen más alternativas».

El principal motivo por el que los habitantes de Sástago se oponen a la nueva variante es la destrucción de gran parte de su huerta, ya que la carretera podría afectar a 200 parcelas. «Nuestra huerta es una de las grandes riquezas que tiene este pueblo. Destruirla puede tener más consecuencias de las que parece», subraya Garín. Al daño agrícola se le podrían sumar perjuicios económicos e incluso sociales. «Aquí había caído mucho la población y gracias a estas parcelas muchos jubilados vienen a vivir aquí y también los inmigrantes deciden quedarse. Si perdemos gente tenemos miedo hasta de perder el consultorio médico», alega preocupado el portavoz vecinal.

Expropiación

La obra, que se declaró urgente en enero de este año, está regulada por la ley de Expropiación Forzosa, por lo que a los propietarios de esos terrenos no les queda mucho más que resignarse. «No nos han dicho todavía nada, pero se habla de que van a pagar a un euro el metro. El dinero es lo de menos en este caso, las pérdidas van por otro lado», explica Garín.

De momento, los vecinos de Sástago están recogiendo firmas para que conste su «total indignación» por la puesta en marcha del proyecto logístico y ya son más de 800 las que se han conseguido. Durante el día de hoy se va a producir una reunión entre los afectados para establecer una guía de acción conjunta que sirva para tratar de frenar el inminente comienzo de las obras. El alcalde de la localidad zaragozana, Jorge Casanova, se ha comprometido a tener en cuenta dicha reivindicación si se conseguía la suficiente movilización popular.