El efecto Fisac no fue suficiente para llevar al Casademont a su primera victoria. El segoviano tiene mucho trabajo por delante para hacer de este grupo un equipo ganador porque con tantos errores, con tan escasos porcentajes, con tanta dificultad para hacer puntos, es imposible ganar hasta a un Fuenlabrada que tampoco está pletórico precisamente y que es un rival directo (79-82). Aun así, el Casademont acabó perdiendo un partido que debió ganar pero que no supo gestionar al final. El equipo necesita más que un cambio de técnico mientras sigue al fondo de la clasificación con cinco derrotas consecutivas. Es ya el peor inicio de la historia del club en la Liga ACB.

Fisac cambió cosas, pero no lo suficiente. Tampoco podía esperarse un milagro con solo dos días de trabajo. El técnico hizo lo que esperaba la grada, puso lógica en el uso de sus piezas, recuperó a Javi García y Hlinason y dio minutos a Aday Mara. Pero los problemas del equipo siguen estando en la producción ofensiva, en la falta de puntos, que facilitan las defensas rivales y van minando la confianza de los jugadores. El triple sigue sin ser el aliado del equipo aragonés, aunque esta vez al menos el equipo jugó más y mejor por dentro.

Fisac, ovacionado a su entrada a pista y en la presentación, devolvió la lógica al quinteto inicial con Ponitka de base y Sant-Roos de alero. Además, devolvió la confianza a Hlinason como titular. El equipo salió enchufado, intenso en defensa, buscando claramente los tiros de tres en ataque. Su problema volvió a ser el mismo que hasta ahora, su escaso acierto. Solo anotó cuatro canastas en juego en los primeros diez minutos. Suerte que, enfrente, el Fuenlabrada tampoco tenía unos porcentajes espectaculares. Pero en la escasez se impuso el conjunto madrileño, que encontró un filón en Juan Fernández.

Hizo más cambios Fisac. El más aplaudido fue darle minutos a Javi García, lo que dejó a Ferrari fuera de la rotación de inicio. El zaragozano salió con ganas pero el equipo seguía sin encontrar los puntos. También utilizó el segoviano a Aday Mara, quien volvió a hacer gala de un descaro y de una naturalidad jugando impropios de su edad y su gigante cuerpo. Un tapón, una canasta de media distancia, un rebote y otra cesta con un reverso incluido fueron su carta de presentación en apenas dos minutos. El canterano es un caso tan único, tan especial, tan diferente, tan extraordinario, que hay que disfrutar cada pequeño gran paso que está dando todavía en casa.

Los errores

Ni siquiera el efecto Mara pudo hacer que el Casademont le diera la vuelta al marcador antes del descanso (34-40). Los continuos errores en sus lanzamientos, los numerosos balones que escupía el aro, las acciones no culminadas en ataque, le impedían avanzar y le condenaron a vivir por detrás en el marcador, en un quiero y no puedo frente a un Fuenlabrada también con lagunas pero más certero en el aro rival.

Ante la falta de puntos, Fisac recurrió a Ferrari en la segunda parte. Se puso en sus manos porque ya no lo quitaría. El equipo siguió fallando y sufriendo pero la diferencia esta vez fue que los jugadores no se sintieron derrotados, no bajaron los brazos y siguieron peleando buscando su oportunidad y acabó enganchándose al partido con un robo y mate de Yusta, un tapón y posterior mate de Hlinason. El Casademont le dio la vuelta al marcador y se sintió poderoso por primera vez esta temporada. El partido seguía siendo un recital de imprecisiones pero, al menos, el equipo aragonés tenía opciones de victoria, que es de lo que se trataba.

No cambió la tónica en el último cuarto, con el Casademont por delante hasta los últimos dos minutos, cuando el marcador fue oscilando a un lado y a otro esperando el fallo final para proclamar al ganador. Y falló más el Casademont. Una pérdida de Yusta cuando el equipo estaba a tres puntos y quedaba menos de un minuto, un ataque siguiente demasiado largo y dejar jugar veinte segundos sin falta al rival acabaron condenando al equipo de Fisac, que tiene mucho, pero que mucho tajo por delante para arreglar esto.

FICHA TÉCNICA

Casademont Zaragoza: Ponitka (6), Jessup (3), Sant-Roos (18), Simanic (3), Hlinason (8) –cinco inicial–, Yusta (9), Ferrari (4), Radoncic (8), Lomazs (9), Mara (4), Mekowulu (7) y Javi García.

Carplus Fuenlabrada: Novak (2), Kromah (21), Senglin (8), Juan Fernández (10), Ristic (13) –cinco inicial–, Marc García (1), Macoha, Hannah (9), Eyenga (7), Bagayoko (9) y Okouo (2).

Parciales: 13-16, 21-24,26-18, 19-24.

Árbitros: Benjamín Jiménez, Rubén Sánchez y Alberto Baena. No hubo exclusiones por personales.

Incidencias: 5.388 espectadores en el pabellón Príncipe Felipe.

Así hemos contado el partido en directo: