Luci Pascua, la experta apuesta al rojo

Luci Pascua, la única jugadora que ha estado en las tres ediciones celebradas en Zaragoza como local, abre la puerta a un posible triunfo del Casademont

Luci Pascua, en su etapa como jugadora del Stadium Casablanca hace siete años.

Luci Pascua, en su etapa como jugadora del Stadium Casablanca hace siete años. / JAIME GALINDO

David García Arlegui

David García Arlegui

Este jueves da comienzo la Copa de la Reina en Zaragoza, una situación que una única jugadora ha vivido ejerciendo de local en las tres ocasiones que el equipo de la ciudad ha jugado la competición. Luci Pascua, quien militó en el entonces Stadium Casablanca en tres etapas diferentes de su larga carrera en la élite, tiene el curioso récord de haber participado en las tres únicas ediciones de la Copa de la Reina disputadas en el Príncipe Felipe jugando con el equipo local. Al menos, será así hasta este jueves.

Luci Pascua, campeona de la Copa de la Reina en 2012 y 2016, ve ahora en el Casademont Zaragoza un equipo que puede dar que hablar en esta edición de la Copa pese a la dificultad de sus oponentes y de jugar un torneo en el que, según explica, «todos los partidos son finales». Incluso, abre la posibilidad a la ilusión de lograr el que sería el primer título en la historia del Casademont femenino: «En la Copa de la Reina cualquier cosa puede pasar. ¿Por qué no? Estando en casa y con la afición a favor, se puede soñar», manifiesta.

Las tres ediciones en las que Pascua jugó (2003, 2010 y 2018) tuvieron un formato diferente. En la primera de ellas, la de la temporada 2002-2003, ocho equipos participaban en el certamen, cuya estructura era similar a la que tiene ahora la Copa de la Reina, con cuartos de final, semifinales y final. El equipo no pudo pasar a la semifinal tras caer contra el Celta. «Lo recuerdo con un sabor agridulce porque fue un evento tremendo en el que la afición llenó el Felipe, algo histórico porque hacía muchos años desde que en Zaragoza no había baloncesto de élite, pero la parte amarga fue perder los cuartos de final contra el Celta», recuerda Luci Pascua, quien cifra la asistencia de aquel encuentro en «7.000 u 8.000 personas».

«En la Copa de la Reina cualquier cosa puede pasar. Todos los partidos son finales»

Para la segunda ocasión en la que Pascua formó parte del equipo que compitió en el Príncipe Felipe como local tuvieron que pasar siete años. El Mann Filter la había fichado de vuelta al inicio de la temporada 2009-2010, y la catalana ya estaba más curtida en la élite tras cuatro temporadas en el San José. En esa edición, el formato del torneo era de dos únicas rondas, con cuatro participantes disputando la semifinal. «Es la que menos recuerdo de las tres ediciones de Zaragoza al jugar solamente con cuatro equipos. No te da tiempo a vivir el ambiente de la Copa», rememora la exjugadora, quien perdió de nuevo en su primer partido. «Y, claro, si encima te toca jugar contra el todopoderoso Ros Casares, lo llevas un poco diferente, con menos presión y simplemente pensando en disputar el partido y en disfrutarlo con tu gente en Zaragoza», sentencia una Luci Pascua a la que le hubiese gustado más el formato que tiene ahora la Copa de la Reina: «Creo que se disfruta mucho más la Copa con el formato actual, con ocho equipos, y no con el de cuatro. Ahora te da mucho más tiempo para meterte de lleno en la competición y disfrutarla», añade.

Fue en la tercera edición en la que, por fin, Luci Pascua y sus compañeras brindaron una victoria al Príncipe Felipe, ganando al Sant Adrià en los cuartos de final de la Copa de la Reina de 2018, que contaba con seis equipos. «El recuerdo de jugar contra Sant Adrià sigue muy presente. Teníamos una dinámica súper positiva en el equipo, aunque ellas ese año fueron el equipo revelación. Tuvimos muchísimo cuidado y jugamos muy concienciadas de que era un equipo que nos podía dar problemas porque estaban compitiendo increíblemente y tenían muy buenas jugadoras», argumenta la pívot. 

«Creo que se disfruta mucho más la Copa con el formato actual, con ocho equipos»

Eliminando al conjunto barcelonés, el Stadium Casablanca se mediría al Girona, contra el que caería 80-60. «Jugamos muy tarde el viernes contra el Sant Adrià (20.45) y bastante pronto el sábado contra el Girona (16.00), algo que nos pasó factura. El equipo aguantó lo que pudo físicamente, creímos durante gran parte del partido pero nos pudo el esfuerzo de la noche del viernes», matiza. 

La ya exjugadora y presidenta de la Asociación de Jugadoras de Baloncesto define el proyecto del Casademont como «increíble, con una base nacional de jugadoras muy potente que es clave para que el equipo funcione bien», y abre de nuevo la puerta a la esperanza para esta Copa de la Reina rescatando sus propias vivencias: «Yo aún tengo muy fresco el recuerdo de ganar una Copa de la Reina contra Perfumerías Avenida con Conquero. Todo puede ser», finaliza Pascua.