Que vuelvan los bases. La crónica del Casademont Zaragoza-Palencia (63-75)

Clara y merecida derrota del Casademont Zaragoza en Ejea de los Caballeros ante el Palencia (63-75) en un encuentro en el que quedaron patentes las carencias que todavía tienen los aragoneses, especialmente en la dirección del juego y en la toma de decisiones de un equipo que reza para que vuelvan sus bases del Mundial.

Comenzó el Casademont acertando desde la larga distancia, con dos triples consecutivos de un Javi García que empezó de titular en detrimento de Lucas Langarita en la bonita pugna que están teniendo los canteranos por ver a quién le da más oportunidades Fisac.

Uno más, de Mark Smith, daba una ligera ventaja a los aragoneses que pronto se evaporó por el atasco generalizado en ataque que se formó en los siguientes minutos. Sin hacer nada del otro mundo, el Palencia fue igualando un duelo que llegó con un pobre 14-14 al final de un primer cuarto en el que los de Fisac solo anotaron dos tiros de dos puntos.

No mejoraron los zaragozanos en el inicio del segundo parcial, algo que sí hizo el Palencia hasta coger su primera renta (16-21). Un 2+1 de Mark Smith pareció despertar al Casademont, que logró equilibrar el luminoso, pero fue un espejismo. Los visitantes se entonaron desde la larga distancia y fueron distanciándose poco a poco. Sujlemanovic, el mejor de los de Fisac en el segundo cuarto, trataba de sostener a los suyos en el duelo. Langarita, demasiado irregular en la primera parte, con un robo y una buena canasta, recortó la renta hasta el 28-33 con el que se llegó al descanso.

Reacción interrumpida

De manera idéntica que el primer cuarto, con un triple de Javi García, comenzó el tercero. Pero Palencia siguió mandando en unos minutos en los que aumentó considerablemente el ritmo anotador por parte de los dos equipos. Hasta 10 llegó la ventaja de los visitantes (36-46) mediado ese tercer tiempo.

Fue en ese momento cuando más la rasmia que el buen juego apareció en el Casademont. Dos 2+1 consecutivos de Langarita y de Yusta sumados a dos triples de Miguel González y de Javi García disminuyeron la renta a solo dos puntos para un Palencia que, sin embargo, seguía anotando. El apretado 52-53 con el que entró el duelo en los últimos diez minutos parecía asegurar un final apretado en Ejea.

Los fallos y las imprecisiones volvieron entonces. En ese juego de errores volvió a coger aire el Palencia, que entraba con ligera ventaja (54-58) en el momento decisivo. Cuando llegó el momento de la verdad, el Casademont no supo qué hacer con el balón en ataque y sus malas decisiones pusieron en bandeja de plata la victoria para un Palencia que no desaprovechó para sumar su primer victoria en la preparación veraniega en un choque que dejó a Fisac con cara de pocos amigos.