Detenido un taxista al incendiar maleza junto a una gasolinera de Zaragoza

Las gasolineras cuentan con carteles preventivos que recuerdan la prohibición de utilizar los teléfonos móviles y mecheros en estos espacios para evitar explosiones. No obstante, estas recomendaciones no pueden hacer nada contra el instinto pirómano del hombre, como así sucedió este pasado miércoles en Zaragoza, cuando un individuo observó a un taxista prender fuego la vegetación próxima a una estación de servicio Nafte, en la carretera del aeropuerto. Hasta allí se desplazó una patrulla de la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Jefatura Superior de Policía de Aragón para detener a A. S. Z., de 48 años de edad, a quien se le imputa un delito de incendio.

También fueron comisionados a las inmediaciones de este área de repostaje los Bomberos con el objetivo de sofocar las llamas, muy próximas ya esta gasolinera Nafte. Cuando los efectivos de la Policía Nacional llegaron allí, comprobaron que la Policía Local tenía retenido a este taxista, momento en el que ellos se hicieron cargo de la intervención.

Los testigos manifestaron a los agentes que A. S. R. había sido el autor del fuego, el cual tenía dos focos separados por, aproximadamente, diez metros.

El robo de la maleta

Precisamente, otro taxista se veía implicado hace justo tres semanas en otro hecho delictivo, en este caso, en el robo de una maleta. El Grupo de Policía Judicial de la Comisaría de Centro inició la investigación al tener conocimiento de una denuncia interpuesta la pasada madrugada del día 24 de febrero, en la que un joven daba cuenta de una apropiación indebida de una maleta de su propiedad que contenía diversos enseres personales y dinero en efectivo por un importe de 1.200 euros.

El denunciante manifestaba haber hecho uso del servicio de taxi de Zaragoza, siendo recogido en la Estación Delicias a las 00.30 horas para desplazarse hasta la calle Conde Aranda de esta ciudad.

Al llegar al destino le dejó 50 euros en concepto de fianza para que le esperase, dejando dentro del vehículo su maleta, acordándolo así entre ambos y facilitándole el taxista su número de teléfono móvil. Cuando regresó cinco minutos después, el taxi se había marchado del lugar llevándose su equipaje y siendo imposible localizarle en el número de teléfono que el conductor le había aportado.

Los agentes, tras entrevistarse con el denunciante verificaron la procedencia del dinero en efectivo que decía llevar en la maleta, que resultó ser el pago de su trabajo en un restaurante, como así aseguró la persona que lo había contratado. Tras realizar las gestiones pertinentes para la identificación y localización del taxista, los actuantes lo citaron en dependencias policiales con el fin de tomarle declaración.

El conductor, manifestó a los agentes que efectivamente había llevado al denunciante hasta la calle Conde Aranda y que al observar el billete de 50 euros que le había dado, creyó que era falso por lo que decidió marcharse.