SUCESOS EN ARAGÓN

Un joven de 25 años, al banquillo por 23ª vez: Agrede a un preso en la cárcel de Zuera

El acusado suma 22 antecedentes penales y la Fiscalía solicita su expulsión de España

Le propinó un puñetazo a la víctima en el patio del módulo I y le tiró dos dientes

Boumadian B., en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial de Zaragoza, ayer. | ANDREEA VORNICU

Boumadian B., en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial de Zaragoza, ayer. | ANDREEA VORNICU / a. t. b.

Tiene 25 años, pero ya es un viejo conocido de varios juzgados de la geografía española como Móstoles, Lérida o Zaragoza. De hecho, su currículum delictivo suma 22 antecedentes penales por delitos en su mayoría contra el patrimonio y, en los próximos días, podría sumar un vigesimotercero, en este caso, por lesiones. Ayer, Boumadian B. se sentó en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial de Zaragoza como presunto autor de una agresión a otro preso durante su paso por el centro penitenciario de Zuera: le propinó un puñetazo en el patio del módulo I de la cárcel y le tiró dos dientes.

El ministerio fiscal solicita tres años y seis meses de cárcel para este joven argelino, si bien considera que esta pena se debe sustituir por su expulsión de España y la prohibición de entrada al país durante los próximos diez años. La petición de la Fiscalía también incluye una indemnización de 210 euros a la víctima por las lesiones y 6.000 por las secuelas.

La víctima recordó ayer ante el tribunal provincial de la Sección Primera, presidido por el magistrado Alfonso Ballestín, que Boumadian le debía 15 euros y, para saldar esta deuda derivada de que «le dejaba tabaco», le entregó a cambio un reloj.

«Luego se empastilló y me dijo que se lo devolviera, pero yo no quise. Salí con él a la esquina del patio y ya pasó lo que pasó: me dio un puñetazo que me dejó inconsciente y sin dientes. Me levantaba y me caía, me levantaba y me caía, me levantaba y me caía», relató. Fue «un solo puñetazo» que le dejó «seco» y sin ese par de dientes, si bien el denunciante aseguró que se ha tenido que cambiar «toda la boca». «Me he gastado más de 8.000 euros solo en el dentista», añadió luciendo al tribunal su nueva dentadura.

Por su parte, el acusado, que declaró acompañado de una intérprete, negó rotundamente los hechos y alegó en su favor que él «no estaba ahí». «Fue entre otras personas, pero yo no estaba ahí», reiteró el joven argelino, a lo que añadió: «No sé por qué se pone denuncia contra mí. La pelea fue en el patio y yo estaba en una sala».

En este sentido, su abogado, Francisco Antoranz, defendió la libre absolución de su representado al considerar que no se había enervado el principio de presunción de inocencia e incluso la víctima se refirió al acusado con el nombre de Fayçal y no Boumadian. «Le llambámos Fayçal y el chico que me pegó es este (le señaló). Le hemos dado la bienvenida en el módulo, se ha sentado conmigo a comer y le he cortado el pelo», añadió el agredido. No obstante, el letrado solició al tribunal que, en el caso de que se emita una sentencia condenatoria, se aplique a su cliente una atenuante muy cualificada por dilación indebida, ya que los hechos enjuiciados están fechados en octubre de 2020.

Ahora Boumadian cumple condena en la cárcel de La Lama, en la provincia de Pontevedra. Entre sus últimos antecedentes penales figuran un robo con fuerza en las cosas en Lérida (un año de cárcel); un hurto (un año) y un robo con violencia e intimidación (tres años) en Zaragoza, y un robo con fuerza en casa habitada en Móstoles (dos años y seis meses). También ha sido condenado por atentado y resistencia a agentes de la autoridad.