La cuenta atrás ha comenzado. Woody Allen rodará en Barcelona, durante siete u ocho semanas, a partir de la segunda quincena de junio del próximo año. La película, que cuenta con un presupuesto de 15 millones de euros, todavía no dispone de título ni de guión, aunque el contrato firmado con la productora Mediapro especifica que el reparto, encabezado por actores norteamericanos, también contará con actores españoles que hablan inglés con soltura.

Jaume Roures, productor de la película, avanza que se tratará de intérpretes que ya hayan trabajado en otras películas de Mediapro. No quiso citar nombres, pero la pista apunta a Javier Bardem y Luis Tosar (Los lunes al sol), y Daniel Brühl y Leonor Watling (Salvador).

El director de Match point hace coincidir el calendario de rodajes con las vacaciones escolares de sus hijos para que su familia pueda acompañarlo. "Rueda en verano, monta la película en otoño y cada año emprende una gira con su clarinete durante las fiestas navideñas", apunta Roures, que se encuentra en San Sebastián con motivo del documental producido por Mediapro Llach: la revolta permanent.

OVIEDO, DESCARTADO

Allen escribirá el nuevo guión cuando finalice el montaje de su tercera película filmada en Londres. "Fui a verlo al rodaje y me dijo que cuando terminara ese filme se pondría a pensar en serio". Lo que sí está claro es que la acción transcurrirá únicamente en Barcelona. "Oviedo queda descartado", afirma.

Las negociaciones emprendidas con la productora Letty Konigsberg, hermana del cineasta neoyorquino, han llegado, según Roures, a buen puerto. "Es el contrato más fácil que he tenido en mis manos. Parecen ajenos al mundo del cine. Todos los actores cobran lo mismo y si quieren una limusina o alojarse en el Sheraton se lo pagan ellos".

Justo ayer, Max Von Sydow, que recibió el premio Donostia, recordó a Allen con especial cariño. El actor sueco desveló la peculiar manera de rodar del director, con quien trabajó en Hannah y sus hermanas. No pudo reunirse con él hasta el primer día de rodaje. "Cuando lo vi en el plató, me acerqué, e inmediatamente desapareció. Me lo hizo dos veces más y al final lo arrinconé y le dije ´hola´. Resulta que no quiere ver a los actores en los ensayos. En las tomas de cámara, trabaja con sustitutos, y después nos hace ver su actuación. Me resultó extraño, pero después me dio bastante libertad".

Scoop, segundo filme de Allen protagonizado por Scarlett Johansson, llega en octubre a España. Roures desconoce si en Barcelona contará con la actriz. "Ojalá". En principio, Mediapro iniciará en solitario la producción del proyecto, para el que tiene "muchos pretendientes". Pero en la búsqueda de compañeros de viaje no pesa lo económico, "sino que sean profesionales que estén a la altura", dice Roures, que se puso en contacto con Allen tras leer un artículo del diario argentino Clarín donde el director elogiaba Los lunes al sol. Su intención es, ante todo, aprender. "Aunque si perdemos dinero con una película de Allen es que somos bastante estúpidos".

Mediapro participa este año en la producción de la nueva película de Jean-Jacques Annaud, el director de El oso y El nombre de la rosa. Pero Roures ya tiene planificados entre cuatro y cinco rodajes para el 2007. La película de Allen no es la que tiene mayor presupuesto. La más cara será La maternidad de Elna, filme que está en manos de Manuel Huerga. "También preparamos la nueva película de Fernando León, que a lo mejor se rueda fuera de España, y quizá otra de Isabel Coixet".