La actriz aragonesa Ana Labordeta (Teruel, 1965) ganadora del premio a mejor actriz secundaria por la serie televisiva Amar en tiempos revueltos (en la 1 de TVE) explicó ayer a EL PERIÓDICO que "éste es un premio que los actores valoramos mucho porque nos lo dan los propios compañeros. Ellos son los que más saben y los más criticones respecto al propio trabajo y al del resto. Y dices: bueno, lo he debido hacer un poquito bien", indicó con ironía.

De vocación tardía, su carrera profesional se centra en el mundo del teatro y series de televisión, aunque también ha participado en algunas películas. Su interpretación como Carlota en la obra 23 centímetros le hizo ganadora del Premio Miguel Mihura en el año 2003, premio que se otorga a la mejor actriz de una obra creada por algún autor español. De este nuevo premio recibido en la noche del pasado lunes en Madrid, Ana Labordeta dice que "no lo esperaba para nada; es más, estaba convencida de que no me lo iban a dar. Ya ser finalista de un premio así da mucho gusto".

Ella se encontró arropada al recibirlo: "En el equipo se ha vivido con alegría este premio; ayer estaban prácticamente todos los actores. También vino Juanma Vanalocha, uno de los productores y Joan Noguera, que es el director de la serie".

MUY ARROPADA

La actriz, hija del cantautor, escritor y político José Antonio Labordeta, se dio cuenta al ser premiada de que "había una energía muy potente: Cuando salí y empecé a hablar escuchaba voces como ¡Guapa! o ¡Bravo! y sé que eran ellos. Y he recibido mogollón de mensajes en los que se alegraban muchísimo. Eso me hace más feliz todavía".

En la serie televisiva, Ana representa a un personaje, Rosario, que trabaja en un club de posguerra, el Morocco. Es una mujer buena y positiva, optimista, que ofrece ayuda y esperanza. No es blanda, sino de carácter fuerte, aunque trata de suavizar los problemas.

Es analítica e inteligente: "Yo soy en la realidad bastante optimista y luchadora, como es Rosario, y también soy positiva, pero veo que no soy tan buena, ni tan generosa, ni tan conciliadora como ella".

Ayer por la tarde estaba preparándose para ir al Teatro Bellas Artes, de Madriid, donde trabaja en la obra Noviembre, de David Mamet. Ana Labordeta aseguró que "con la edad" ha aprendido a "relativizar" y ha conseguido "que las alegrías no te hagan poner los pies fuera de la tierra y que las tristezas o disgustos tampoco te hundan demasiado". La actriz concluyó que este premio recibido "es queridísimo, pero lo importante es seguir trabajando".