La Galería de los Uffizi de Florencia puede cantar victoria. Tal como la institución italiana había exigido hace un mes, Pornhub finalmente ha retirado los cuadros de la colección del famoso museo florentino que aparecían en Classic Nudes (Desnudos clásicos), una especie de guía virtual de arte erótico creada por el popular portal pornográfico, según ha revelado la revista especializada en temas culturales The Art Newspaper.
La decisión del portal llega después de que los Uffizi amenazaran en julio a Pornhub con acciones legales por estar usando sin permiso obras como La Venus de Urbino (1543) de Tiziano, y El nacimiento de Venus (1485) de Botticelli. Esta obra, una de las piezas más icónicas del Renacimiento florentino, incluso había sido añadida en la campaña de Pornhub con una explicación de la actriz porno y exdiputada italiana llona Staller, conocida como ‘Cicciolina’.
De nada sirvió la argumentación de Pornhub de que Classic Nudes tenía como filosofía ayudar y dar visibilidad a los museos tras meses en los que el sector cultural fuera gravemente golpeado por la pandemia del coronavirus. "Puede que el porno no se considere arte, pero algunas obras de arte definitivamente son porno", se leía en la presentación de la iniciativa de la plataforma, propiedad de la compañía con sede en Luxemburgo MindGeek Holding.
El procedimiento correcto tenía que ser, según los Uffizi, una solicitud de Pornhub para obtener la autorización del museo, que debía aprobar el proyecto, y luego debía beneficiarse de un impuesto por el uso de las imágenes de los cuadros usados. La negativa italiana se basaba en que en Italia existe una legislación de 1993, integrada por normas añadidas en 2004 y 2014 en el Código de los Bienes Culturales, que admite el uso libre de imágenes de lienzos y otras obras a título privado o para usos científicos o educativos. Pero esto no incluye las obras que se emplean para el uso comercial.
Pornhub "ni ha solicitado ni tiene autorización" para utilizar las imágenes de las obras maestras de los Uffizi, explicó en julio un portavoz de los Uffizi. "Es uno de los muchos casos de uso comercial de nuestras imágenes sin autorización. Siempre nos movemos de la misma manera: hay una ley precisa y queremos que se respete", añadió.
La advertencia legal italiana también inspiró las quejas del Louvre de París y del Prado de Madrid, cuyas obras figuraban asimismo sin autorización en los vídeos de Classic Nudes y que ahora también han sido eliminadas por Pornhub. Este no es el cado de obras de la National Gallery de Londres, el Metropolitan Museum of Modern Art de Nueva York o el Museo de Orsay de París que, al menos de momento, continúan saliendo en Classic Nudes.
El caso se convierte en un símbolo de las fronteras que el mundo del arte (o al menos una parte de este sector) está intentando marcar ante el avance de nuevos fenómenos sociales, vinculados al auge de las tecnologías. No en vano, antes del caso de Pornhub, los Uffizi también se habían quejado en mayo por el uso de algunas de sus obras por parte de algunos influencers; el célebre museo de Florencia, dirigido por el alemán Eike Schmidt, ya lleva tiempo con un dinámico canal propio en TikTok que ha conquistado a muchísimos jóvenes.
