Sobre la posibilidad de lo salvaje es el título de la nueva temporada de la Orquesta de Cámara del Auditorio de Zaragoza Grupo Enigma en lo que será la segunda de Asier Puga como director titular y artístico de una de las agrupaciones más veteranas del panorama aragonés. Esta vigésimo séptima temporada incluirá cinco conciertos, dos actividades online y casi una decena de actos complementarios o fuera de temporada.
Así, esta programación se ha diseñado, según explicó la propia formación durante la presentación que se celebró ayer en La casa amarilla, en base a parámetros como «la pluralidad artística, conmemorar el centenario del compositor Iannis Xenakis, innovar buscando nuevos espacios, recuperar obras de compositores poco interpretados en España, colaboración con otras agrupaciones aragonesas así como reforzar el apoyo a las futuras generaciones y también la presencia de Enigma en ciclos y festivales a nivel nacional».
La temporada se abrirá el 24 de enero de 2022 en la sala Luis Galve con el concierto Pensamientos verticales, una cita en la que se presentará la última obra de Morton Feldman, su cuarteto para trío de cuerda y piano. Feldman es un compositor en el que el dramatismo de la naturaleza sonora se expresa en toda su complejidad.
El 21 de febrero será el turno de un concierto que contará con dos estrenos absolutos, Tragedia, que se celebrará en la sala Multiusos del Auditorio de Zaragoza buscando precisamente romper los espacios performativos. Ahí se escuchará Coatlicue, de Mario Duarte; y Medea, de Iannis Xenakis en versión semiescenificada (estos serán los dos estrenos) así como el Concierto para flauta número 2, de Vivaldi; y Mater amatísima, de María Ruido. El concierto correrá a cargo de Enigma, el performer Carlos Llavata y Ensemble Vocal Teselas.
Ya en marzo, la formación volverá a la sala Luis Galve ya que el día 21 se celebrará el concierto American great again, un tríptico sonoro, una cronología al azar dentro de la historia musical de Estados Unidos por medio de tres compositores, Ruth Crawford Seeger, Aaron Copland y John Adams.
En 1979, 10 años después de los disturbios de Stonewall y un año antes de que el VIH fuera clínicamente observado, Julius Eastman compuso Gay Guerrilla, una fantasía coral para cuatro instrumentos que muestra su activismo y compromiso político. Esa será la base del concierto del 25 de abril en lo que será estreno en España.
El quinto concierto incluido dentro de la temporada será el homenaje a Iannis Xenakis en el centenario de su nacimiento. El 9 de mayo, Enigma presenta, por segunda vez en España, la versión completa de la Oresteia que Xenakis compuso entre 1965 y 1992. La formación compartirá escenario con el barítono Maciej Nerkowski, el coro infantil de Amici Musicae y el Ensemble Vocal Teselas.
«La radicalidad y subversión del pensamiento, la ruptura de convenciones, la reivindicación del rito y la magia o la influencia queer -explican desde la formación- son los vértices que han servido como guías para diseñar esta temporada que combina la música con la poesía, el cine, el periodismo o la performance».
Fuera de temporada, Enigma tiene previsto, además, actuar dentro del ciclo Introducción a la música, en la Fundación Juan March, en Oviedo, en el festival Múver del Gobierno de Aragón y en el Donostia Musika.
El programa de este Sobre la posibilidad de lo salvaje se completa con la actividad online que tiene prevista dos exposiciones: La realidad eléctrica. Arte sonoro latinoamericano entre enero y marzo de 2022; y Recorridos sonoros, de Chuse Fernández, entre abril y junio del mismo año.
Además, la formación vuelve a convocar el concurso Juan José Olives y sigue trabajando en la apuesta por nuevos valores musicales dentro de la idiosincracia que ha adoptado la orquesta de cámara.
