El desierto de los Monegros se convertirá este sábado en el punto de encuentro para los más de 55.000 amantes de la música techno, que llegarán desde 85 países distintos para asistir al Monegros Desert Festival, un evento que generará un impacto de 30 millones de euros en la economía local, según los organizadores.

El director del festival, Juan Arnau, ha indicado en una entrevista con Europa Press, que del total de asistentes, unos 25.000 son extranjeros. Aparte de España que está en cabeza, los países con mayor representación de asistentes son Francia, con 6.000, e Italia, con 5.000.

Además, como novedad, Estados Unidos es el cuarto país con mayor número de asistentes al festival, ya que cerca de 4.000 estadounidenses viajarán hasta este enclave situado entre las localidades oscenses de Fraga y Candasnos. Se trata de una cifra muy elevada en comparación con ediciones anteriores, ha dicho Arnau.

El festival cuenta con un presupuesto de 7 millones de euros, una cifra que se ha visto incrementada entre un 10 y un 15 por ciento respecto a la cuantía que se barajaba hace un año, ha añadido Arnau apuntando que tanto la pandemia como la crisis de existencias han afectado a este sector.

Desde la organización han estimado que tendrá un impacto en la economía local de 30 millones de euros y, por el momento, los alojamientos turísticos ya están viendo la repercusión del festival. "Todo está absolutamente reservado a 150 kilómetros a la redonda", ha asegurado Arnau.

Gran reto logístico

Monegros Desert festival regresa tras un largo parón desde su última edición en el año 2014 y para su vuelta se han preparado once escenarios y un cartel integrado por 125 artistas.

Arnau se ha referido a esta nueva edición como "un reto logístico", ya que se trata de un festival "muy complejo y creativo" con un gran número de escenarios diferentes, en comparación a los cuatro o cinco que se solían instalar en ediciones anteriores.

El 'Moon', un espacio de otra galaxia, un avión airbus A330 o un tren que se convierten en una pista de baile, o 'El Pajar', el antiguo espacio para los caballos y las mulas reconvertido en una sala de conciertos serán algunos de los lugares en los que el público podrá bailar al ritmo de las distintas variantes de la música electrónica.

Hasta el desierto de Los Monegros llegarán artistas de la talla de Paco Osuna, Adam Beyer o Vitalic para llenarlo de música durante 20 horas de forma ininterrumpida. El cartel cuenta con una amplia representación internacional y en el festival estarán presentes los artistas norteamericanos Psycho Realm (Los Ángeles) y Busta Rhytmes (Nueva York). Mientras que el talento local correrá a cargo del oscense Andrés Campo, dj residente de la sala fragatina Florida 135.

La forma de pago

Arnau ha comentado que la gente está confiando en la vuelta del festival y las entradas están prácticamente vendidas. "Durante 20 horas nos vamos a convertir en la segunda ciudad más grande de todo Aragón".

Por este motivo, y con el objetivo de evitar aglomeraciones y filas de espera, ha instado a todos los asistentes a recargar antes de ir su pulsera 'cashless'. Se trata de un sistema novedoso que se lleva utilizando durante varios años en los festivales europeos y que consiste en que la gente puede recargar esa pulsera con la cantidad de dinero que elija, a través de su cuenta en Howler.

De esta forma, cuando los asistentes lleguen a la entrada se les entregará la pulsera que ya han cargado previamente con el dinero y se evitarán tener que hacer este proceso allí. Está es la única forma de pago que habrá dentro del recinto del festival, ya que por las circunstancias del espacio no habrá buena conexión a Internet ni cajeros automáticos.