Santi Balmes, vocalista del grupo Love of Lesbian, centra la mirada en el Vive Latino, que se celebra los días 2 y 3 de septiembre en Zaragoza y al que van a acudir con su último disco de estudio ‘Viaje Épico hacia la nada’, que ha sido “como partir de una calle sin salida y tener que girar tu cabeza para andar en la dirección contraria”.

El cantante, que basa el secreto de este grupo de indie rock que “tiene un ritmo interno” en el sentido del humor y la lealtad, asegura en una entrevista con Efe que esa nada “intenta definir la tragicomedia de la vida en la que nos sentimos”, por lo que buscan “rellenarla de esperanza” lejos de “pensar demasiado” porque puede ser “el peor enemigo”.

Por primera vez se celebra el festival Vive Latino en España y se ha elegido la ciudad de Zaragoza para ello. ¿Cómo se preparan para este día? ¿Qué va a poder ver el público en el concierto?

Bueno, supongo que es de las típicas noches en las que la banda se viste con sus mejores galas. Creo que vamos a salir con muchas ganas ya que venimos de un mes de vacaciones… ¡El primero que nos hemos tomado en agosto durante años!

En ‘Viaje Épico hacia la nada’... esa nada... ¿Qué aspecto tiene?

Nos parecía un título inspirador, pero en realidad esa nada intenta definir la tragicomedia de la vida en la que nos sentimos, por necesidad psicológica, más importantes de lo que realmente somos como seres humanos. Esa nada la rellenamos de esperanza en todo el disco, quizás lo más sensato.

Este proyecto va desde la sencillez hasta los rincones más oscuros. ¿Cuál es la idea con la nació? ¿Cuál es su propuesta musical?

Era un disco que parte de una tragedia, y, por lo tanto, te deja un tanto tocado, haciéndote preguntas sobre todo. Supongo que esos altibajos anímicos, aceptados todos como semilla para la creación, crean un todo bastante completito sobre lo que acostumbra a ser un año en la vida de todos.

Y, por ende, ¿el qué definiría como punto de partida? ¿Hay algo que haya servido de origen para desarrollar la idea?

Sí, parte de un suicidio de alguien a quien apreciaba mucho. Creo que era un punto de inicio extraño, pero interesante. Es como partir de una calle sin salida y tener que girar tu cabeza para andar en la dirección contraria.

El disco es una invitación a no dejar de moverte y a tomar decisiones sin que otros lo hagan. ¿Es un canto a la libertad y a tomar las riendas, por lo tanto, de nuestras vidas?

Sí, por supuesto. Esa libertad que cuesta tanto de ejercer por decenas de prejuicios. Supongo que vencerlos es el primer paso, o acaso empezar a andar sin tanta reflexión previa.

¿Es un mensaje que hace falta lanzar, todavía más, hoy en día? Y que no se debe perder, claro…

Sí. Al menos en mi caso, la experiencia me ha demostrado que pensar demasiado te lleva al bloqueo. Conozco a unos cuantas personas cuyo peor enemigo es darle demasiadas vueltas a todo, entre los que a veces me incluyo. El equilibrio entre acción-reflexión es necesario para que las aguas no se estanquen.

Una de las canciones más míticas de su carrera es ‘Allí donde solíamos gritar’. ¿Cuál es ese lugar especial al que acudían a gritar?

Son las canciones. Esa canción se refiere a cualquier desahogo creativo. Allí seguimos acudiendo para gritar.

Como grupo han conseguido grandes éxitos. ¿Qué sueños quedan por cumplir?

Creo que no perder la espontaneidad. Estamos en ese punto de carrera que podríamos tirar de estilo. Y no se trata de eso.

Además, el año que viene hacen 25 años como banda. ¿Cuál diría que es su secreto en esta industria tan cambiante?

Yo diría que es la amistad, la lealtad, el respeto mutuo y, sobre todo, el sentido del humor.

Y… ¿Siguen sin recordar una anti-historia mejor? ¿Mantienen esa esencia?

Espero que sí. Creo que la banda tiene un ritmo interno que sigue a la vida, pero en su particular cauce. Lanzamos mensajes al exterior y resulta que hay seres ahí fuera que los reciben (risas).

Retomando el festival Vive Latino, uno de los artistas que iba a ser invitado pero que ha tenido que cancelar su show es Enrique Bunbury. ¿Cuánto ah supuesto la música de este zaragozano en su trayectoria?

Es una lástima no tenerle, pero creo que Enrique es una persona muy sabia. Creo que algo en su fuero interno hizo saltar una alarma y es una persona muy fiel a sus principios. Este tipo de cosas son las que reafirman a Enrique como alguien a quien dar de comer aparte.