El Periódico de Aragón

El Periódico de Aragón

NOVEDAD EDITORIAL

Cristina Araújo (ganadora del Premio Tusquets): "Quiero escribir sobre los temas de los que la gente no quiere hablar"

La escritora madrileña ha presentado este miércoles en Zaragoza su primera novela, 'Mira a esa chica', con la que se ha llevado el Premio Tusquets

La escritora madrileña Cristina Araújo Gámir, este miércoles en Zaragoza, donde ha presentado su primera novela. ANDREEA VORNICU

La escritora Cristina Araújo Gámir acaba de ganar el Premio Tusquets con su primera novela: 'Mira a esa chica'. La autora madrileña, de 42 años, ha construido una incómoda narración sobre las consecuencias de una agresión sexual poniendo en juego distintas perspectivas y miradas. Araújo se mete en la piel de la víctima y protagonista de la novela, pero también en la del resto de implicados y en la gente de su entorno, buceando así en las emociones y sentimientos de todos ellos. De esta forma, la escritora madrileña logra huir de la novela panfletaria y articula una historia adictiva y necesaria sobre una experiencia dramática al final de la adolescencia.

Asegura que lo que más le interesa como lectora es la psicología de los personajes. En su libro los expone a una situación extrema. ¿Buscaba eso precisamente? ¿Cuál fue el germen del libro? 

La novela empezó a tomar forma en mi cabeza después de escuchar y leer todo lo que tienen que hacer las chicas justo después de haber sufrido una violación. Lo que tienen que pasar cuando van a Urgencias y todas las pruebas a las que se tienen que someter, como por ejemplo la del sida y los análisis posteriores. Todo eso me hizo pensar que cuando escuchamos un caso así nos quedamos solo con el impacto inicial, pero no en las consecuencias inesperadas. Toda esa parte del después, esa intromisión en la rutina, es lo que quería contar realmente. Y es cierto que eso me permitía bucear en esa hondura psicológica.

Al empezar a leer la novela es inevitable acordarse del caso de La Manada. ¿Cuándo escribió ‘Mira a esa chica’?

Empecé a escribirlo en verano de 2020 y completarlo totalmente me costó un año más o menos. La novela no se me ocurrió por lo de La Manada, pero ese caso me sirvió para establecer una especie de hilo argumental. Al final, el libro es un collage de todos los casos reales que he leído y de los que me he documentado. Muchas de las cosas que aparecen en el libro salen precisamente de ahí.

¿Es este un libro necesario?

Sobre todo creo que es necesario saber que la gente que sufre estos casos tiene luego un camino muy largo por delante. Con todo este flujo de noticias tan acelerado ocurre que algún suceso nos impacta en un momento determinado y sentimos una gran empatía, pero al día siguiente ese impacto se olvida por la aparición de otra tragedia. Esto es algo muy obvio porque yo también veo las noticias comiéndome la lentejas, pero no deja de ser menos cierto que todas esas consecuencias y procesos pasan más desapercibidos. La relación con amigos y familiares, los miedos, la culpa y los dilemas que afrontan las chicas que pasan por esto me interesaban especialmente. Al final, lo que me interesa es escribir sobre los temas de los que la gente no quiere hablar.

"El caso de La Manada no motivó este libro, pero me sirvió para establecer el hilo argumental"

decoration

Es un libro que estremece. ¿Fue difícil para usted escribirlo?

Puse mucha distancia. Además, las cosas más duras de leer no las escribí realmente porque muchas procedían de las transcripciones de los casos, que los rehíce para que no fueran tal cual. Por eso no tuve que detenerme mucho en los aspectos más desagradables. Lo que sí que me costó mucho fue el personaje de la chica, porque me daba mucho miedo que se le malinterpretara o no se la entendiera bien, ya que ella al principio es muy dura en sus juicios y demás. De hecho, el libro me ha quedado más largo porque no dejaba de explicar a la chica una y otra vez. Quería que el lector tuviera empatía con ella a pesar de que no es perfecta.  

Ha ganado varios premios de relatos, pero nunca había escrito una novela.

Yo siempre quiero escribir novelas. De hecho, hace ya mucho que no escribo relatos porque me parecen muy complicados. 

Ha reconocido que en ‘Mira a esa chica’ resuenan los ecos de las novelas de Joyce Carol Oates.

Sí, sobre todo me ayudó a encontrar la estructura del libro. Ella también escribe a veces así de un modo que parece experimental y este libro era muy de ese plan. Me gustó mucho la idea de escribirlo con esa estructura porque casaba muy bien con lo que tenía en la cabeza y cómo lo quería contar. 

¿Cómo se ha documentado para escribir la novela?

He recurrido a transcripciones judiciales, sentencias de distintos casos, protocolos médicos de varios países y libros de estadísticas sobre violaciones. Y para las fases del trauma contacté con algunas psicólogas. Lo que no quise fue hablar con ninguna víctima.

"Los episodios más duros proceden de las transcripciones reales de diferentes casos de violación"

decoration

El pensamiento patriarcal sobrevuela la novela. 

Entiendo, y comparto, la lectura que se ha hecho en ese sentido, porque es una exposición de situaciones muy duras para una chica. Pero mi intención nunca fue instruir ni nada de eso. De hecho, me daba un poco de miedo que pareciese que estaba siendo oportunista.

La edición de este año del Premio Tusquets recibió 736 manuscritos. ¿Fue una sorpresa ganarlo?

Por supuesto. Todavía hay veces que me pregunto si el libro lo merece. Llevo toda la vida queriendo publicar una novela y, de hecho, ya había pensado alguna vez en tirar la toalla. Cuando estos días me autocalifico como escritora aún lo flipo (risas). 

¿Tiene otras novelas anteriores en el cajón?

Sí, pero no creo que tengan la calidad suficiente. Algunas las escribí en mi época universitaria.

¿Qué proyecto tiene ahora entre manos? 

Estoy con una novela muy diferente a esta. He recuperado una historia que comencé cuando era muy joven y lo que he hecho es tomar como punto de partida a esos personajes. Es la historia de una relación entre un chico y una chica en su época universitaria. Tiene mucho de introspección también, pero la estructura es más clásica. Y aparte de esta novela tengo alguna otra en cartera. Lo que quiero es seguir dando mucha importancia al estilo, que es lo que hago como lectora. Me fijo mucho en cómo está escrito, la selección de palabras, que las metáforas no sean las típicas. Casi le doy más importancia al estilo que a la historia. 

Compartir el artículo

stats