RESEÑA LITERARIA

Crítica de Javier Lahoz de 'Me llamo Victoria': Un rostro de mujer

Miguel Vasserot acaba de publicar ‘Me llamo Victoria’.

Miguel Vasserot acaba de publicar ‘Me llamo Victoria’. / El Periódico

Javier Lahoz

Se llama Victoria y es todo un personaje del Madrid de la 'Belle Époque'. Darle vida sobre el papel es el misterioso encargo del que ha de ocuparse Lorenzo Hernández, escritor con hambre de éxito que busca integrarse en los círculos literarios y destacar en los ecos de la sociedad, datos de relevancia que narra con detalle aunque con poca repercusión popular. Victoria merece una gran biografía porque su personalidad es arrolladora. Es una dama elegante y seductora, sabe lo que no quiere e incluso lo que quiere, y se enfrenta a presencias que no le permiten pasar inadvertida. Conoce a la perfección la noche y desafía el orden establecido, como si las normas fueran un espejismo que desaparece al despertar. Cualquier cometido en el que se implica y que supone un revulsivo para la sociedad acartonada y marchita la obliga a reconocerse a sí misma y a sus circunstancias. Trapichea y negocia, camina entre sombras, se refugia en el arte del disfraz y reúne dentro de sí enigmas que exigen una minuciosa observación.

Victoria ha elegido un nombre de guerra y se hace llamar Hada cuando trabaja. De alguna manera, lo suyo es pura magia para la que se sirve de todo tipo de trucos. De repente conoce a una mujer implacable que no se anda con rodeos y que le propone la incorporación a sus negocios. Es fácil que las desconfianzas se crucen y que ninguna de las dos controle los movimientos de la otra. Es una época de belleza pero también de contrastes, a los que conviene no dar la espalda. Un estallido de arte se palpa en estas páginas y salpica al lector, colores primarios y secundarios que se mezclan, que hacen que la luz sea más luminosa y que la oscuridad sea más terrible. Son colores esenciales que terminan plasmados en las miradas, quizás un tanto apagadas dada la sordidez que parece invadir cualquier nuevo propósito.

El autor de esta novela es el almeriense Miguel Vasserot, abogado en ejercicio que ya cuenta con trabajos literarios anteriores. En cada página se nota que ha realizado una minuciosa labor de documentación. El ambiente se palpa, y no hay detalle que se le escape al lector. De Lorenzo se salta a menudo a Victoria, y de Victoria se salta a Lorenzo, aunque a no tardar es ella la que se impone y acapara la atención por completo. Y la intención, por supuesto. Sus diálogos son seductores y la intriga emerge con fuerza, dándole a la trama un toque de suspense que añade emoción y exotismo. No va a parecer de fácil resolución, dadas las circunstancias, pero el enredo está servido y todo parece indicar que las complicaciones no tardarán en llegar.

Capítulos cortos

'Me llamo Victoria' es una historia escrita con fluidez, se estructura en capítulos cortos, y sus protagonistas respiran ansias de libertad. Ese aire de modernidad que les invade describe una época pero también supone una importante muestra del cuidado con el que se les retrata. Sus diálogos les definen, y se advierte una espontaneidad que elimina prejuicios y refleja cómo los deseos afloran y dirigen sus pasos. Hay humor que sugiere y seduce, quizás también nacido de esa recreación en la que predomina el sabor a vanguardia. Victoria se rodea de personajes que se adaptan al mundo en el que viven pero que no acaban de estar satisfechos con los logros obtenidos. La ambición se adivina en el trasfondo, en los escenarios, entre los cortinajes.

El autor incide en dotar de vida propia a los exteriores y a los interiores, como si la belleza de la ubicación fuera primordial desde el momento en que se accede a las primeras páginas. De modo que el lector se sumerge en un mundo que acaba de resucitar y del que no va a querer apearse. Un mundo que, quizás, nunca se haya ido del todo, pues hoy en día hay referentes que nos conducen a su esencia. Y luego están quienes viven, malviven y sobreviven sin percatarse de que están haciendo historia por partida doble, en minúsculas y en mayúsculas. Publicada por Roca Editorial, el formato también la convierte en una obra que invita totalmente a ser leída.

A mí estos bellos años con los que arranca el siglo XX me encantan. Y de alguna manera los he recuperado, como si se tratara de uno de esos viajes que conviene hacer al menos una vez en la vida. Este es un libro que tiene la llave para que entremos a esos salones majestuosos. Hay aventura, pasiones, deseos, intrigas y sorpresas, ingredientes que a partir de este momento Victoria ya no va a mantener ocultos. 

'ME LLAMO VICTORIA'

Miguel Vasserot

Roca Editorial

224 páginas

18,90 euros