Las últimas jornadas de los campeonatos siempre suelen comportar temores en las casas de apuestas. En esta ocasión, el escándalalo planea sobre el partido entre el Huesca y el Nástic, que acabó con victoria catalana por 0-1 el pasado domingo. El conjunto aragonés ya tenía asegurado el ascenso y el cuadro visitante se jugaba la vida en plena lucha por eludir el descenso en la penúltima jornada de Segunda División. Según avanzó ayer el diario El Confidencial, el choque podría haber sido amañado.

Una treintena de las 59 principales casas de apuestas de todo el mundo se vieron obligadas a eliminar de su oferta ese encuentro tras detectar «movimientos inexplicables» en las cotizaciones. El Reus-Córdoba, que acabó con triunfo andaluz, también está siendo investigado.

Hora y media antes del comienzo del duelo en El Alcoraz, apostantes de Ucrania empezaron a jugar grandes cantidades de dinero a favor del equipo catalán, que se encontraba a 29 puntos del conjunto aragonés en la tabla clasificatoria. En el descanso la tendencia fue la misma, entrando también dinero a favor del Nástic desde Asia.

Finalmente, los pronósticos se cumplieron para estos apostadores. El conjunto catalán partía con ventaja por ser el único que se jugaba algo, pero la cuota varió tanto que la tendencia en las apuestas a favor de los catalanes hizo sospechar a las casas de apuestas. La victoria visitante recibió tanto dinero y su cotización se hundió tan rápido que los grandes operadores temieron que el partido estuviera amañado. En algunas casas, un resultado positivo para los de fuera llegó a pagarse con una cuota de solo 1,50 frente a los 5,75 euros por euro apostado que marcó el triunfo de los aragoneses, que en ese momento todavía eran líderes de la categoría.

También se detectaron entradas de dinero a favor de que el primer tiempo terminaría 0-0. Así acabaron los 45 minutos iniciales. Firmas como 888, Interwetten, Betclic, Ladbrokers, Pinnacle, Sbobet y Unibet cerraron la opción de poder apostar a ese partido. La victoria del Nástic generó beneficios de al menos 10 millones de euros. El Huesca perdió el liderato.

La plantilla tarraconense se mostró sorprendida. «Al que vea el partido no le quedarán dudas. El Huesca jugó muy intensamente y no quiso decepcionar a sus aficionados, que celebraban el ascenso», manifestó Javier Matilla, centrocampista del Nástic. El cuadro aragonés, mientras, también se defendió. «No tenemos nada que decir. El club está al margen de eso. Si ha habido alguna de las cosas que se han publicado seremos los primeros en perseguirlo», apuntó el director general Josete Ortas.