La undécima edición de la Canfranc-Canfranc, conjunto de carreras por montaña de larga distancia que se disputarán el próximo mes de septiembre en la citada localidad del Pirineo aragonés, contará con varias modificaciones.
La Canfranc-Canfranc se desarrollará entre los días 8, 9 y 10 de septiembre y consta de cinco pruebas que suman 240 kilómetros y más de 21.000 metros de desnivel positivo. La prueba pirenaica acoge dos ultra trail (100 y 70 km), un maratón (45 km), una carrera corta (16 km) y un kilómetro vertical de descenso.
La Ultra 100 kilómetros del 2017 mantiene su distancia y desnivel (100 km y 8.848 metros de desnivel positivo, la altura del Everest) si bien se aplican cuatro modificaciones en su recorrido para mejorar la prueba y hacerla más segura respecto al corredor. El tope de participantes será de 150 corredores.
La prueba partirá de 1.200 metros de altitud y llega a alcanzar los 2.886 metros de cota máxima en la cima de la Peña Collarada transcurriendo en un 70% por encima de los 2.000 metros de altitud.
Aparte del ya mencionado Collarada, hace cima en los picos de la Pala de Ip (2.779 m), La Moleta (2.572 m), Vértice del Anayet (2.555 m), La Raca (2.287 m), La Tuca Blanca (2.322 m) y El Aspe (2.645 m), recorriendo a su vez valles vírgenes y espectaculares como el de Ip, la Canal Roya y la Canal de Izas, pasando por los ibones de Ip, Iserías, Las Foyas, Anayet, Truchas, Escalar y Tortiellas.
"Las características de la prueba la convierten en la carrera de 100 kilómetros con mayor desnivel del mundo y según la I-TRA (International Trail-running Asociation) son los 100 kilómetros más largos del mundo, lo que a su vez la convierten en la única carrera que otorga a los finalistas 6 puntos para correr el Ultra-Trail@ del Mont Blanc en tan solo 100 kilómetros", informa la organización de la Canfranc-Canfranc.
La Ultra-Trail de 70 km comparte con la de 100 km bastante parte del recorrido, salvo la parte inicial. Comienza a 1.200 metros de altitud y llega hasta los 2.645 metros de cota máxima en el pico Aspe. Aparte de éste hace cima en los picos de la La Moleta (2.572m), Vértice del Anayet (2.555m), La Raca (2.287m), La Tuca Blanca (2.322m) y El Aspe (2.645m).
El Maratón tendrá modificaciones en la bajada de la Larraca, donde es desviado 200 metros para mejorarlo y la carrera de 16 kilómetros no sufre ninguna modificación.
El kilómetro vertical de descenso partirá del pico Larraca hasta la Canal Roya (3,9 km con un descenso de 966 metros). En 2016 fue gran novedad y este año se repite. Se realizará el viernes por la tarde y se podrá acceder en una telesilla para poder observar su recorrido como espectador.
Se trata de un descenso bastante directo por toda la ladera sur del pico de Larraca. Una bajada donde la primera parte es por fuera de sendero y el último tercio por un camino bastante cómodo donde el corredor deberá dar el máximo para llegar a la meta.
