Un tanto de Karim Benzema dio el triunfo a un Real Madrid plano, sin confianza y lento en su juego, frente a un Rayo Vallecano al que le bastó orden para instalar el nerviosismo en el Santiago Bernabéu y que acarició el empate en los últimos segundos.

El Madrid salió enchufado con la intención de borrar de la memoria la noche gris del CSKA y a los trece minutos ya mandaba en el marcador. El firme inicio del Rayo se derrumbó cuando Lucas metió velocidad y visión de juego al desmarque de Benzema entre rivales. Su derechazo cruzado inalcanzable para Dimitrievski.

Los blancos dispusieron de una ocasión de ir a por el partido, pero le falta confianza y firmó una actuación soporífera. Permitió al Rayo hacer daño con una llegada de Embarba como falso 9 buscando espacios. La entrada de Bebé mejoró al cuadro de Vallecas. Mientras, delante, un Real Madrid estático, con todos sus jugadores atenazados y sin alegría, con un susto incluido por un golpe sobre Benzema que le impidió acabar el encuentro. Vinicius fue el elegido para intentar alegrar los últimos minutos, pero fue el Rayo el que puso emoción con una doble ocasión en la que Alegría y Velázquez se topaban con Courtois y Carvajal bajo palos.