En el río revuelto del sector del automóvil, la ganancia se la lleva la Confederación General del Trabajo (CGT), que es el único sindicato que ha crecido en las elecciones celebradas en el conjunto de los fabricantes en España. En los comicios celebrados en el 2002 y en lo que llevamos del 2003, que suman el 80% de las empresas, CGT ha aumentado su representación del 8,8% de hace cuatro años al 12,5%. Los 3,7 puntos que ha crecido la CGT son los que han perdido los dos sindicatos mayoritarios CCOO y UGT y el resto de centrales independientes y minoritarias. CCOO y UGT consideran que CGT ha captado el voto radical, aunque este sindicato matiza que ha atraído al grupo cada vez más numeroso de trabajadores descontentos con la demanda creciente de flexibilidad interna de las multinacionales.

Fuentes próximas a las empresas del sector advirtieron de las consecuencias negativas que puede tener una radicalización de la representación sindical en la negociación de las medidas de flexibilidad necesarias. CCOO ha perdido 1,7 puntos en el reparto de delegados reelegidos en el 2002 y el 2003, según los datos recopilados por esta central. El descenso de UGT fue de 0,6 puntos, y el de los sindicatos independientes o regionales alcanzó 1,4 puntos.

"Los sindicatos que firmamos acuerdos que suponen sacrificios tenemos problemas de desgaste. Pero no podemos hacer otra cosa para garantizar el futuro de las fábricas", asegura Antonio Ruiz Ocaña, responsable de automoción de UGT.

El último ejemplo de ese desgaste son las elecciones en Nissan, donde UGT perdió 5 delegados que atribuyó al coste de firmar un convenio que preveía que los nuevos contratados cobrasen un 17% menos y que fue anulado por una sentencia.

En los últimos cuatro años, la mayoría de fábricas de vehículos españolas han aplicado salarios más bajos a los jóvenes que se incorporan, aunque se produce una equiparación con el resto de plantilla en unos años. El voto de estos trabajadores se ha convertido en decisivo, así como el de los empleados descontentos con los cambios en el calendario de producción.

Los nuevos trabajadores "desean entrar en estas empresas" aunque sea cobrando menos que sus compañeros, pero "cuando llevan unos años así se mosquean", afirma Máximo Blanco, secretario de automoción de la Federación del Metal de CCOO. Por ese motivo, el sindicato insiste en acotar el plazo de discriminación.